
El jefe de misión del Consulado paraguayo en Iguazú, Magno Álvarez, cumplió con recorrido en la zona de Control Fronterizo, ubicado en la zona primaria del Puente Tancredo Neves.
Esto se dio luego de que un grupo de camioneros paraguayos denunciaran malos tratos por parte de Gendarmería en Argentina, solicitando la intervención del Ministerio de Relaciones Exteriores de Paraguay para corregir esta situación.
En el paso de frontera con Brasil, Álvarez estuvo acompañado por el segundo comandante del Escuadrón N° 13 de la Gendarmería Argentina, Juan Carlos Cuevas y del jefe Sección Puente, segundo comandante Claudio Caballero, a fin de conocer la situación general del paso de cargas durante los monitoreos periódicos, en contexto de la emergencia sanitaria por la pandemia de Coronavirus. Cabe recordar, que Gendarmería es la fuerza encargada de la custodia del tránsito terrestre.
En el recorrido de la zona, custodiada por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Dirección de Migraciones, Gendarmería y Sanidad, se constató que ningún connacional al mando de camiones de cargas se encontraba al momento de la verificación. Ahondando en las averiguaciones, el último paraguayo cruzó la frontera Puerto Iguazú-Foz de Iguazú, hace 33 días.
El Cónsul paraguayo, constató además que se cuentan con todos los elementos necesarios para una estancia cómoda, con servicios básicos y verificación sanitaria, en el área mencionada.
En diálogo con los transportistas que cumplían con los trámites propios para el paso de frontera, todos de nacionalidad brasileña, se coincidió en el buen trato y acompañamiento permanente de funcionarios y autoridades de las instituciones involucradas.
Por otra parte, el comandante Meza Cornaló del Escuadrón 13 Iguazú, aclaró que “los camioneros paraguayos no ingresan por Iguazú a la Argentina, sino por la provincia de Formosa, por Clorinda”.
Contexto
Toda esta maraña de situaciones se conoció hace unos días luego de que transportistas del vecino país denunciaran maltratos por parte de Gendarmería Nacional, en el paso fronterizo de Clorinda (Formosa), uno de los pasos habilitados para que los camioneros paraguayos ingresen a suelo argentino
Antes de entrar a la Argentina, los conductores se someten al test rápido del Covid-19 y acceden a la desinfección de los camiones. Los conductores absorben los costos de ambas medidas, indicó el medio digital Itapúa en Noticias.
“Creemos que son maltratos, con medidas muy arbitrarias, al entrar al territorio argentino les hacen un test rápido y eso está bien, pero desde ahí ya no pueden bajar de los vehículos ni para comprar agua, ni para ir al baño y son escoltados por la Gendarmería para que ya no puedan bajar del camión”, comentó Diego Lemos, vocero del transporte internacional involucrado.
Detalló que se remitió una nota a través del Ministerio de Relaciones Exteriores para tratar de “humanizar” el protocolo, ya que los trabajadores llevan horas conduciendo y necesitan hacer sus necesidades e hidratarse. “Si querés ir al baño te aguantás o hacés en una botella, creemos arbitrario porque si le hacen la prueba y da negativo cuál sería el inconveniente”, expresó Lemos.
Por su parte, Julio César Vera Cáceres, embajador paraguayo en la Argentina, reconoció que por instrucciones del Gobierno argentino, se forma una fila de una determinada cantidad de camiones que luego son escoltados por una patrullera hasta Clorinda para controlar que no paren en ninguna estación de servicio o tienda para comprar provisiones.
“Estamos tratando de solucionar el tema, la Cancillería Argentina tiene que conversar con cada gobierno provincial y tratar de encontrar un punto equilibrio entre la prevención de la salud y los derechos humanos”, afirmó Vera.
Fuente: La Voz de Cataratas / Itapúa en Noticias.