En Misiones, ya con la flexibilización de visitas a familiares, el Día del Padre aportó mucho más movimiento en esta ciudad y también en localidades cercanas.
El cementerio local, un espacio emblemático para homenajear entre recuerdos a los difuntos en un día tan particular, tuvo un intenso movimiento durante toda la jornada.
De hecho, en un momento fue tan grande el flujo de gente que debieron quedarse en la calle para poder cumplir el distanciamiento obligatorio.
Sin lugar para estacionar, desde las 8 de la mañana el cementerio “La Piedad” recibió a visitantes, quienes estrictamente debían cumplir el protocolo sanitario como medida para evitar la propagación del COVID-19.
Asimismo, el estado del predio evidenció que contó con una preparación de limpieza, mantenimiento del parquizado y descacharrizado, en prevención del dengue y desinfección ante la pandemia.
Los cuidadores del lugar empezaron su horario laboral y no se movieron de sus puestos hasta que partió el último visitante. Ellos fueron quienes recibieron a la gente y se encargaron de seguir e indicar los protocolos.
“El paso de visita de la gente en el transcurso de la mañana ha sido muy importante, ya entrada la tarde, cercana a la hora de cierre de las 18, el lugar ya había recibido a más de 1.500 personas, que respetaron en general el acatamiento de uso de barbijos y disposición de alcohol en gel o agua con alcohol”, detallaron a PRIMERA EDICIÓN.
Los empleados de Obras y Servicios Públicos apostados también dieron cuenta de que en más de un oportunidad no sé permitió el ingreso a unas 20 personas que intentaron hacerlo sin tapabocas.
Cementerio de Piray
Durante todo el día de ayer, unas 300 personas visitaron el camposanto de Piray, sin la aplicación de un estricto protocolo pero también sin las aglomeraciones que se vieron en Eldorado.