“Este tiempo de aislamiento ha venido a repercutir en lo económico y las familias modificaron su proyecto adoptivo. Nuestros adoptantes se inscriben mayoritariamente para un niño. En esa modificación algunos pasaron de buscar de tres a dos niños, es decir, bajaron la cantidad de niños que aceptan adoptar”. Así lo explicó en el programa “Aire de Sábado” por FM 89.3 Santa María de las Misiones, Claudia Galeano, directora del Registro Único de Aspirantes a la Adopción de Misiones (RUAAM).
La funcionaria del Poder Judicial misionero aseguró que “tiene que ver con este tiempo de excepcionalidad, por eso los grupos de cuatro hermanos son difíciles de lograr en razón de la cantidad”, al contar un caso puntual de cuatro niñas y un niño que no consiguieron una familia misionera y ahora se les busca hogar a nivel nacional.
El RUAAM se ocupa de la inscripción de los postulantes a adoptar. Misiones es parte de una red federal, cuya cabecera está a cargo del Ministerio de Justicia y DDHH de la Nación con la que trabajan en vincular a misioneritos con familias de toda la Argentina. Todo el servicio es gratuito.
“Nosotros nos encargamos de orientar a las familias sobre los requisitos y pasos para que se formalice la inscripción. Las personas o familias, porque la ley permite que la persona sea casada, viuda, en situación convivencial, presentan la documentación y se evalúan las capacidades parentales por medio de psicólogos y trabajadores sociales del Poder Judicial”, explicó Galeano sobre el rol de la dependencia.
“Si se cumplen los requisitos, los aspirantes pasan a ser parte del listado del que los jueces seleccionan a quienes podrán ser adoptantes”, agregó la titular del RUAAM.
“Cuando surge el estado de adoptabilidad, el juez elige a la familia según las necesidades de los niños, niñas y adolescentes según las características de cada caso. Si el niño no puede ser adoptado en Misiones por diferentes razones, se busca otra familia en otra provincia mediante el Registro Nacional. Pero se trata de evitar todo lo posible el centro de vida de los niños, por eso se agotan las posibilidades en Misiones” detalló Claudia Galeano.
Medio centenar de vínculos en 2020
En lo que va del año, de enero a junio, el Registro consiguió vincular a unos 50 niños, niñas y adolescentes misioneros con familias. “Durante todo este tiempo de pandemia, el RUAAM siguió con su trabajo respetando las medidas de bioseguridad. No hubo interrupción en este tiempo porque la finalidad es dar respuesta a los niños, niñas y adolescentes que buscan una familia. Sí se fueron repensando estrategias en el panorama de excepcionalidad”, indicó Galeano.
“En los últimos seis meses se han concretado guardas con fines de adopción tanto en Misiones como en otras provincias, sobre todo con adolescentes. Se dieron alrededor de 30 causas de procesos de vinculaciones adoptivas donde tenemos unos 50 niños, niñas y adolescentes”, precisó la titular del RUAAM.
“La demanda, afortunadamente para los niños que buscan una familia, es mucha. El eje son los niños para restituirle el derecho de vivir en un contexto familiar. El RUAAM tuvo 170 inscriptos de toda Misiones hasta ahora. De estos, alrededor de 60 en este momento, están esperando una entrevista o un llamado para la selección adoptativa. Con los 110 restantes aproximadamente se sigue trabajando en el acompañamiento de las familias para que las guardas con fines de adopción consiga una parentalidad permanente”, reveló Claudia Galeano.
Aseguró que “no son tantos los niños en condiciones de ser adoptados como se cree. Hacia fines del año pasado con cifras del Observatorio de la Vicegobernación de la provincia, había un 12% de la totalidad de niños institucionalizados”.
Cualquier persona que quiera inscribirse para adoptar, puede hacerlo hoy de manera online en ruaam.jusmisiones.gov.ar llegando a la solapa denominada “Se busca familia”, donde se ha creado un formulario para la inscripción de interesados en los casos publicados en la página web del Registro.
Familias que los devuelven
“Hubo casos de procesos excluyentes, es decir el reintegro de los niños a su anterior situación por parte de familias adoptivas. Por eso es muy importante el acompañamiento a las familias”, indicó la titular del RUAAM.
Lo que debemos resguardar en todo momento y proteger es a los niños, niñas y adolescentes que han transitado situaciones de mucha vulnerabilidad, de mucho dolor. Debemos poner el eje en la protección para que no se sumen más vulnerabilidades. Por eso tenemos que lograr con la adopción, parentabilidades que sean saludables, permanentes para que las familias y los niños se encuentren de manera definitiva”, explicó Claudia Galeano.
Dos casos “difíciles” para vincular
Claudia Galeano admitió a FM de las Misiones , la radio de PRIMERA EDICIÓN que las menores posibilidades de adopción se dan en niños de mediana edad y en grupos de hermanos.
“Tenemos un grupo de cuatro hermanos, sin posibilidad de ser adoptados en Misiones, que ahora pasaron a una instancia nacional; y a su vez hay unos pocos interesados en grupos de tres hermanos”, explicó la funcionaria.
“La tendencia es que las familias buscan rápidamente vincularse con bebés, la edad sigue siendo un punto neurálgico. Tenemos muy pocas familias que respondan a niños de 12 años con lo cual se agotan los llamados a todas las familias inscriptas, a veces con respuesta positiva”, indicó Claudia Galeano.
Así, recordó que cuatro hermanitos de 6, 8, 11 y 14 años esperan una familia en forma conjunta. Se trata de tres niñas las mayores y un niño de 6 añitos que no consiguen volver a ser parte de una familia que los quiera adoptar en forma conjunta.
“Los hermanitos cuentan con un vínculo amoroso fuerte y una relación fraterna profunda; por lo que la búsqueda de familias se orienta hacia un único grupo familiar de manera indivisible”, destacaron desde el RUAAM.
Identificados por letras para preservarlos, B.M. es una niña de 14 años “tímida, pero muy dulce, activa y de excelente trato que requiere acompañamiento para seguir transitando la escolaridad satisfactoriamente, ya que sus deseos y ansias por superarse lograron un destacado desempeño escolar; aunque para continuar necesita de sus hermanas y de una familia como apoyo emocional y afectivo. Le gustaría realizar deportes, conocer el cine y tener muchas amigas”.
M.M., de 11, es “dulce, simpática, que demanda atención, cariño y cuidados. Le gustaría practicar deportes y tener amigas para compartir sus experiencias de vida”.
F.R., es una niña de 8 años “que se caracteriza por lo vivaz, locuaz y entusiasta acerca de seguir aprendiendo. Le gusta bailar, pintar, jugar y le gustaría que le leyeran muchas historias y libros de cuentos”.
Finalmente el más pequeño es L.G. de 6 años “dulce, inquieto y vivaz que demanda permanentemente la necesidad y deseos de tener una familia, como otros niños con los que socializaba en la escuela a la que asistía. Le gusta jugar al aire libre, leer, pintar y que le cuenten historias y muchos cuentos”.
Todos cuentan con un estado de salud bueno. Aunque se sugiere el acompañamiento psicoterapéutico, para transitar de la mejor manera su proceso adoptivo.
Madre adolescente con una niña
Con 15 años cumplidos en noviembre pasado, una adolescente busca una familia que la quiera adoptar. M.Y. tiene un hijo de tres años y la Justicia les busca un hogar que quiera darles la oportunidad de crecer juntos.
“La adolescente no cuenta con vinculación familiar alguna, y les gustaría tener una familia que les brinde amor, cuidados y la posibilidad de crecer y desarrollarse integralmente a ambos en un contexto familiar único”, indicó el RUAAM en su convocatoria a interesados en el proceso de adopción.
M.Y. “es una niña reservada, voluntariosa y muy entusiasta respecto de su futuro. Le gusta jugar, pasear, descubrir y conocer nuevos lugares, mirar televisión y películas. Se encuentra escolarizada en un programa de escolaridad semi-presencial y de terminalidad de estudios primarios. Ambos niños cuentan con un estado de salud bueno”.