A través de una iniciativa del vicepresidente de la institución Carlos Balbuena, y con el pleno acompañamiento de la Comisión Directiva de la Asociación Civil Músicos de la Selva (MUSSEl), que nuclea a trabajadores del sector en toda la provincia, se elaboró un proyecto que pretende darle una solución económica directa a centenares de músicos, que por la pandemia y las restricciones sanitarias, se vieron obligados a cesar en sus actividades laborales.
Entre los aspectos destacados del petitorio, que fue entregado este lunes en mesa de entrada de la Secretaría de Estado de Cultura, se describe que “las principales preocupaciones económicas de los trabajadores del sector cultural, musical, artístico son las siguientes: 1- Pérdida de ingresos derivada de cancelaciones. 2- Incapacidad para cumplir con obligaciones con servicios públicos o estatales. 3- Pérdida de empleo. 4- Imposibilidad de cumplir con pagos de deuda y créditos”.
Desde la Asociación sin fines de lucro, que desde hace cinco años trabaja en el fomento de la música de sus artistas, se sostiene que es necesario visibilizar la situación precaria en la que persisten muchos en Misiones, a causa de la suspensión prolongada de la actividad del sector. Más allá de los esfuerzos ingentes que desde la cartera de Cultura se efectúan para paliar todas las dificultades y privaciones de los músicos, como de los artistas de otras ramas de la expresión cultural.
En este sentido, MUSSEL expresó en su petitorio que “por esto, como asociación abocada al interés colectivo del sector cultural de la música y sus trabajadores, proponemos y solicitamos que el Gobierno de la Provincia tenga a bien analizar la viabilidad de un programa de salvataje económico, pensado con carácter urgente y que contemple fondos que oscilen entre los 30 mil y 60 mil pesos para ayudar a los trabajadores de la cultura (músicos, técnicos, etc.) que sean autónomos o monotributistas y que estos devuelvan en contraprestación realizando una acción solidaria, vinculada con la disciplina u oficio del/de la beneficiaria, para una asociación de la sociedad civil, organización gremial o institución pública (escuelas, bibliotecas públicas, centros culturales, etc.)” remarca el documento.
En el texto también se aclara que la contraprestación de los músicos puede ser evaluada y decidida por la Secretaría de Estado de Cultura en cuanto a la forma, a su difusión y la utilización de sus canales oficiales al efecto.
Desde la organización de músicos, esperan ser convocados por la cartera cultural, para avanzar en un proyecto ajustable a la realidad y a las posibilidades del estado que es hoy por hoy, un actor central de las políticas de asistencia a los más afectados por la pandemia.