
La Fundación Ferrocarril del Nordeste Argentino junto a la Secretaría de Acción Social de San Ignacio y la EPET 12 de esta localidad, harán un trabajo de recuperación de sillas de ruedas rotas para poder entregarlas a las personas que lo necesiten, con el objetivo de garantizar un acceso rápido a las mismas, sea de manera temporal o permanente.
Hace muchos años que la creadora de la Fundación recorre el país en búsqueda de sillas de ruedas. “Hay mucha gente que hace años está esperando tener acceso a una silla de ruedas porque los trámites para que te den una, son muchos y tardan demasiado tiempo”, contó Analía Colazo a PRIMERA EDICIÓN.
La iniciativa con la EPET 12
La iniciativa surgió como una necesidad ante el aumento de la demanda de sillas y la imposibilidad de reponer el stock. “Hace muchos años vengo entregando sillas de ruedas a nivel nacional. En épocas normales, suelo viajar a Buenos Aires para rescatar las sillas”, contó Colazo.
En tren, colectivo e incluso camiones, Analía recorrió ciudades enteras en la búsqueda de las sillas. Sin embargo, con el inicio de la pandemia, no pudo viajar más y por un tiempo sus acciones solidarias quedaron paradas, hasta que “en este momento en que no se puede viajar, tenía que ver cómo reponer el stock de sillas que iba entregando”, dijo.
Así fue que empezó a recolectar los restos de sillas de ruedas abandonadas que encontraba y las guardó para poder restaurarlas en algún momento. “Fui a entregar una de las sillas a San Ignacio y allí el secretario de Acción Social, César Ramírez, me comentó sobre la posibilidad de que la EPET 12 se encargue de la restauración de las sillas y equipos ortopédicos que yo había juntado”, narró Colazo a este Diario.
Ante la propuesta, “fuimos a hablar con el director y acordamos que nosotros le brindábamos los recursos y ellos se iban a ocupar de arreglarlas”, señaló y agregó que “esta semana juntamos todas las partes y las llevamos a la EPET 12. Con toda la buena predisposición, el director nos recibió y nos mostró las instalaciones donde las iban a reparar”.
En cuanto a este nuevo proyecto, Analía destacó que el objetivo es doble: “la idea es facilitarle el acceso de las sillas a las personas que realmente las necesiten para que tengan una mejor calidad de vida y, a su vez, generar en los chicos de la EPET 12 la empatía de la solidaridad con aquellos que necesitan una mano”.
También podés ayudar
Como la demanda de sillas de ruedas es muy grande, lo que más necesitan es cualquier tipo de equipo ortopédico en desuso. “Hay muchas casas donde las familias tienen sillas de ruedas rotas o que le falta alguna parte y nos la puede facilitar para que la reparemos y entreguemos a las personas que necesitan. Es una gran cadena en la que todos podemos mejorar la vida de alguien más”, destacó.
En este sentido, señaló que aquellos que quieran donar la silla, pueden comunicarse al número 3764-290221.
“Bastones, andadores o muletas… todo es bienvenido. Me escriben por WhatsApp y organizamos para pasarla a buscar y poder ponerla en valor como para que siga ayudando a la gente”, agregó Colazo.
En cuanto a la entrega de las sillas, Analía mencionó que “actualmente implementamos la entrega en comodatos como para que no se pierda la silla. En el caso de que, por alguna causa, la persona deje de usarla, la idea es que la devuelva para que la pueda usar alguien más”.
En este sentido, contó que “me pasó hace muy poco que falleció uno de los niños a los que le había dado una silla postural y la mamá inmediatamente se comunicó conmigo para devolverla. Gracias a eso esa silla ahora sigue circulando y ayudando a más personas”.