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El susto ya pasó para Mauricio Maslovski (20). Tras ser aislado el último martes de manera preventiva, el arquero misionero que forma parte del plantel profesional de Rosario Central finalmente regresó a los entrenamientos, luego de que un nuevo test le diera negativo.
“Gracias a Dios, el último jueves me hicieron un nuevo test y salió negativo. Estoy feliz porque no tengo el virus y pude volver a entrenar”, le dijo en las últimas horas a EL DEPORTIVO uno de los embajadores misioneros que tiene el fútbol grande de la Argentina.
Tal como informó EL DEPOR, la alarma se encendió en el plantel de Primera de Rosario Central, dirigido desde hace semanas por Cristian Kily González. En uno de los tantos testeos de rutina dieron positivo el utilero Héctor Cardozo y uno de los entrenadores de arqueros, Diego Zuljan. Como Mauri había entrenado con Zuljan, tanto él como otros seis compañeros fueron aislados de manera preventiva.
“La verdad es que personalmente fue todo bastante duro, porque no me lo esperaba. Estuve tres días encerrado, aislado en casa, después de esos casos positivos. Fue como volver a la primera etapa de la cuarentena”, explicó Maslovski, quien en la entrevista del último martes se había mostrado positivo al vaticinar que no tendría el virus.
Y aquello, afortunadamente, se cumplió. “Gracias a Dios el jueves me hicieron un nuevo testeo y me salió negativo, así que ya volví a entrenar. Estoy feliz porque no tengo el virus y estoy bien”, celebró Maslovski, sin dejar de lado la preocupación por sus compañeros y tampoco el agradecimiento por quienes se preocuparon por su salud: “Quiero agradecer a todos los que se preocuparon y me estuvieron apoyando. Estoy bien, así que ahora a seguir entrenando tal como lo veníamos haciendo”.
En la última tanda de testeos, en la que Mauri salió negativo, el Canalla registró un nuevo positivo, por lo que ya son tres en la entidad.
“Más allá de todo eso, seguimos bien. Estamos entrenando bajo todos los protocolos, de manera estricta, con todas las medidas, para que no haya más casos y podamos trabajar tranquilos, que es lo que necesitamos”, explicó el guardavallas nacido en Posadas pero afincado desde pequeño en San Ignacio, quien agregó: “Estuvimos cinco meses parados y te aseguro que nadie quiere volver para atrás. Por eso, todos nos estamos tomando muy en serio, con la mirada puesta en el regreso de la competencia”.
Ya superado el susto, el objetivo ahora para Maslovski es ganar terreno. Ya forma parte de los cuatro arqueros del plantel profesional y sueña con el debut en Primera, sobre todo después de la partida de Jeremías Ledesma al Cádiz de España.
“Como se fue Jere, hay un lugar más para ocupar, así que quiero aprovechar eso y seguir entrenando para ganarme mi lugar. Eso es lo importante y la expectativa que tengo a corto plazo. Quiero seguir subiendo escalones y debutar en el arco de Rosario Central”, finalizó el misionero.