He pintado rosas en valles azules,
he bordado sueños en dorados tules,
he permitido mezclar mis sentidos
pues así los potencio, siendo este el objetivo.
Imagino blondas olas de amor
quitando de mí todo temor,
arrancando van las espinas de la duda
dejando así a la dualidad muda.
La duda es una aptitud de la mente de 3D que oscila en la dualidad entre lo que cree y lo que no. Recorriendo todos sus rangos va formando las creencias que se alojan en el inconsciente desde donde maneja al hombre; éstas pueden ser suyas, ajenas, heredadas, etc., pero siempre se mueven dentro de lo conocido.
Cuando no conoce aplica la duda, hasta tanto la sociedad, una institución o personas acreditadas, establezcan como cierto. La duda se clava como espina en el entendimiento drenando la verdad, si es que lo fuera o generando mentiras aprovechando que la mente dual no posee certezas. Al ser parte del razonamiento pertenece al consciente y la reacción del individuo ante lo desconocido es el miedo.
Aclarado lo que es la duda y dónde y cómo de se desenvuelve queda por interpretar la primera parte del poema, que se despliega en otro plano de consciencia. Allí cuando en sueños, la persona se une a la red dorada de amor donde borda sus propias creaciones y al desplegar sus sentidos en ese plano, se potencian debido a que no se ven limitados con el razonamiento y la duda de la mente y se lanza a lo desconocido sin temor, dejando a la dualidad muda.
Sabiendo que nos encontramos en pleno cambio dimensional deberíamos tomar los sueños como referencia de lo nuevo que se viene y que mucha de su magia ya la estamos experimentando, y empezar a aplicar la creativa imaginación en lo que nos queda por transitar de 3D.
Como la mente no tiene la capacidad de crear debido a su temor a lo desconocido y sabiendo que lo opuesto al miedo es el amor y como Dios es amor, lo primero a imaginar serían blondas olas de amor o polvo de hadas dorado bañándonos, llenándonos y sintiendo, al llenarnos de Dios, cómo desaparece el temor para luego sumergirnos en la magia del Amor Incondicional de Dios.