Días atrás en la aldea Iryapú, que se encuentra en las 600 Hectáreas de Puerto Iguazú, se organizó un partido de fútbol amistoso de veteranos, entre Club Unión Cataratas y los integrantes de dicha aldea guaraní , a los que le gusta jugar y mucho a la pelota.
El encuentro pasó a un segundo plano cuando, al llegar los jugadores del Club Unión Cataratas, les llamó la atención un coatí jugando con los perros del lugar y luego correteando como uno más de la aldea.
Mauro Servin, uno de los jugadores del Club Unión, captó las imágenes del animal y luego decidió consultarle al cacique por dicho ejemplar.
Así Servin le comentó a PRIMERA EDICIÓN, que el cacique le contó la historia de dicho animalito. “Lo traje muy herido del monte cuando era pequeño. Lo curamos y lo íbamos a regresar a su hábitat natural cuando se mejorara”.
A lo que añadió: “Sin embargo una vez ya curado comenzó a corretear por lugar, entablar amistad con los perros de la aldea e incluso los pequeños del lugar”.
“Tiempo más tarde fue imposible devolverlo al monte y se quedó con nosotros hasta el día de hoy, transformándose en toda una atracción para la gente que nos visita”, relató el cacique a Mauro.
Fútbol y algo más…
El partido amistoso se jugó ante la atenta mirada de todos, pero pronto todos los ojos volvieron a posarse en el coatí que se acercó tímidamente en las cercanías de los jugadores y mostró su amistad ante los desconocidos.
En otro tramo de la charla Mauro relató que “tras la invitación para venir a jugar a la aldea Iryapú no nos imaginábamos encontrarnos con esta sorpresa, por ello tomé imágenes del juego entre este coatí y los perros, y también algunas fotos”.
“Me llamó mucho la atención que todo el mundo en la aldea lo tenía como una mascota más y el animal se correteaba en el lugar sin ningún peligro. Es algo que no se ve todos los días, a veces ni siquiera en el Parque Nacional Iguazú y menos en medio de esa convivencia tan particular con los aldeanos y los perros del lugar”, remarcó Servin.
Datos a tener en cuenta
El coatí de cola anillada sudamericano, mundi o mishasho (Nasua nasua), es una especie de mamífero carnívoro de la familia de los prociónidos que habita predominantemente en las selvas sudamericanas y la parte meridional de Centroamérica.
Su piel es o pardo suave o negra, con vientre más claro, y anillos blanco en la cola en muchos casos. Su cabeza es delgada con una nariz alargada, orejas pequeñas, pies negros, cola larga no prensil usada para balancearse y señalar.
Los adultos miden 41-67 cm de la cabeza a la base de la cola, agregando 30-60 cm a su longitud total. A los hombros alcanzan cerca de 30 cm, y pesan entre 3-8 kg. El macho puede llegar a ser el doble de grande de la hembra, y tiene unos caninos grandes y afilados. Tiene fuertes miembros para subir y cavar, y reputado por su inteligencia.
Caminan sobre sus pies (plantígrado) y pueden descender de árboles cabeza abajo gracias a sus flexibles articulaciones. Prefieren dormir o descansar en lugares elevados y en nichos.
Los coatíes llevan vidas tranquilas, son animales curiosos, que a veces van a las zonas urbanas a “robar” cosas. Su longevidad en estado salvaje es de 15 años y en cautiverio unos 17-20 años.
Fotos y video: gentileza Mauro Servin / Daniel Barboza.