Navidades: época de ritmo frenético con el trabajo, las compras de los regalos y las comidas y cenas familiares, los niños en casa y nos encontramos con que unas veces por falta de tiempo y otras por la pereza de ponernos a hacer ejercicio en lugar de descansar, dejamos de lado los hábitos saludables, comemos más de la cuenta y apenas hacemos ejercicio.
Las Fiestas Navideñas cada año comienzan “antes” por lo que cada año disponemos de más días “de peligro” en los que podemos acumular más kilos y más grasa de la deseada debido a los múltiples compromisos sociales: comidas y cenas familiares, comidas y cenas de empresa, atracones de dulces típicos de estas fechas, las copas de nochebuena y nochevieja, el cotillón de la noche de reyes, el ya clásico roscón en cualquiera de sus variantes.
Sin duda, el ambiente obesogénico se vuelve más virulento en estos días (o semanas mejor dicho) y por ende la importancia de seguir realizando ejercicio físico se acentúan.
Mantén la motivación realizando ejercicio físico
Otro efecto beneficio de no abandonar la práctica deportiva es mantener los niveles de motivación: si dejamos de hacer deporte y ganamos peso, es muy posible que nos sintamos posteriormente culpables y puedan caer los niveles de motivación. Sin embargo, si continuamos ejercitándonos durante estas fiestas, además de mantener un mejor humor y mejor ánimo debido a la liberación de endorfinas, seremos capaces de mantener los niveles de motivación necesarios para no abandonar “por falta de tiempo”.
Evita que la quema de calorías se frene practicando algún deporte
Si la ingesta calórica va a aumentar debido a los numerosos compromisos sociales y familiares y al aumento en la disponibilidad de alimentos ultraprocesados, reducir el tiempo que dediquemos a realizar alguna actividad física lo único que va a producir es un empeoramiento de nuestra salud. Por ello, continuar realizando deporte va a mantener el proceso de quema de calorías “casi intacto”, y si bien puede que no perdamos peso, al menos evitaremos ganarlo mientras nos mantengamos activos.
Sé un ejemplo para los demás
Ser capaces de mantener nuestra rutina de entrenamientos a pesar del frenesí de las fechas navideñas nos puede hacer ver a ojos de los demás como un buen ejemplo a seguir, lo cual es algo muy positivo debido a los numerosos malos ejemplos que abundan en esta época en forma de anuncios televisivos, en paradas de autobuses, Internet, prensa.
Pensar que si somos capaces de cambiar los hábitos de una persona y ayudarla a mejorar su salud, la contribución que estamos haciendo tanto a esa persona como a su entorno es sin duda algo altamente beneficioso y con mucho más valor del que puedas pensar.
Además, cuando hablamos de ser un ejemplo para los demás, debemos pensar que este punto cobra muchísima importancia si tenemos niños, pues muchas veces aprenden y toman como referencia los modelos más cercanos a ellos, es decir, sus padres, motivo por el cual es importante que nos vean realizando actividades deportivas y comiendo de forma saludable.