Fue como intentar “tapar el sol con las manos” desde alguna oficina del Centro Cívico posadeño, ya que muchos padres que comenzaron a planificar el año escolar de sus niños y adolescentes, fueron recibiendo de los colegios los avisos no sólo de incremento de los aportes mensuales sino también de las inscripciones.
Bajo el título “El SPEPM (Servicio Provincial de Enseñanza Privada de Misiones) descarta que el aumento de cuotas esté en la agenda”, se aseguró que hoy “la preocupación del organismo se encuentra centrada en garantizar las condiciones para el regreso seguro a la presencialidad”, prevista para el 1 de marzo.
¿Acaso la economía de las familias y el sustento de los establecimientos privados no pueden atenderse a la vez con lo sanitario y epidemiológico?
Tal vez no hay funcionarios en Educación capaces de intentar solucionar dos temas a la vez o con colaboradores que atiendan dos necesidades de este tiempo.
Tal como informó PRIMERA EDICIÓN con datos concretos de institutos de Posadas con valores y porcentajes, lo concreto habría sido que esos funcionarios educativos que tratan de desmentir la realidad, hubieran anunciado una “tregua” con los colegios hasta marzo para ver cómo se implementan los aumentos de las cuotas.
Las instituciones educativas deben continuar trabajando, tienen costos que cubrir y es el Estado provincial el que regula los valores mediante resoluciones. Sin embargo, como la resolución no está, los colegios se adelantaron “a cuenta”.
Lamentablemente, hay organismos con conductores políticos que -mediante un confuso comunicado de prensa- pretenden que los padres olviden que les informaron los incrementos y que deje de ser una preocupación para la economía de sus hogares. Que intentan con letras hacer real lo que no es. Que se muestran alejados entre lo que es y lo que pretenden que sea.