Un hombre oriundo de Misiones es uno de los siete imputados por integrar la banda narco del “Señor de los Cielos” paraguayo y que comenzó a ser juzgado en el Tribunal Oral Federal 1 de Mar del Plata.
Según consta en la instrucción el individuo de la tierra colorada era la mano derecha del sindicado líder de la organización internacional que se dedicaba al transporte de estupefacientes en avionetas, desde Paraguay hacia la provincia de Buenos Aires.
El mencionado cabecilla es Cicinio Cardozo Benítez (53), quien fue bautizado por la policía con el mismo apodo con el que se conoció al capo narco mexicano Amado Carrillo Fuentes, el líder del temible Cártel de Juárez.
Los que ahora lo acompañan en el banquillo de los acusados fueron capturados la misma noche que él, el viernes 24 de marzo de 2017, cuando llegó en una de sus avionetas al aeródromo de Navarro, ubicado en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, sobre la ruta 41 y a 100 kilómetros de la Capital Federal.
Momentos antes, según la investigación, parte de la gavilla descargó la droga y luego de que el “Señor de los Cielos” aterrizara con su piloto en un camino rural cercano, en el partido de General Belgrano. En ese operativo los efectivos incautaron dicha carga, de casi media tonelada de marihuana, además de otras dos narcoavionetas que estaban en un hangar que los narcos alquilaron meses antes.
Dicho arresto no fue improvisado. La organización criminal tuvo un seguimiento por parte de la Policía de Buenos Aires durante un año. Hubo más de 6 mil horas de escuchas telefónicas.
Según las pesquisas, las aeronaves efectuaron más de 30 viajes a Paraguay durante 2016.
El debate
Con una conjunción de virtualidad y presencialidad con los protocolos que implica la pandemia, el debate comenzó el pasado miércoles en Mar del Plata.
La instrucción de la causa y cuya lectura inició el juicio, desentramó las maniobras del contrabando de estupefacientes. Seguidamente el presidente del Tribunal Oral Federal 1 de esa ciudad balnearia, Roberto Falcone -acompañado por sus colegas Héctor Sagretti y Fernando Machado Pelloni a través de videoconferencia-, le dio la palabra al fiscal general Juan Manuel Pettigiani, quien brindó una síntesis del acuerdo de juicio abreviado que el Ministerio Público Fiscal suscribió con las defensas de seis de las siete personas imputadas: fuera del acuerdo quedó el principal acusado, Cicinio Cardozo Benítez.
El juez Falcone constató con los acusados y la acusada el convenio alcanzado -quienes mantuvieron conexión desde sus domicilios o unidades penitenciarias donde cumplen arresto, según el caso- y planteó que se resolverán todas las situaciones que se presentaron a juzgamiento de manera conjunta al final del debate.
Luego, se escucharon los testimonios de ocho policías que tuvieron intervención en la causa.
Por un lado, se refirieron a sus intervenciones en las tareas de inteligencia criminal que están incorporadas por lectura al debate; y también dieron cuenta del operativo en los que se incautó 444,570 kilogramos de marihuana, de la dinámica de la organización, y de la forma en que Cardozo Benítez, indicado como el cabecilla y principal imputado de la banda, organizó el transporte y contrabando de marihuana en avioneta desde Paraguay.
El rol del misionero
De acuerdo a la instrucción, ese 24 de marzo de 2017 Cicinio Cardozo Benítez ingresó al territorio nacional -desde el Paraguay- casi media tonelada de marihuana, organizada en 34 bultos que contenían 533 panes de esta sustancia compactada.
El destino de los estupefacientes era su distribución y comercialización en distintos puntos del país, con centro en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.
De la maniobra delictiva hubo participantes clave: una de ellas ofició de piloto de la aeronave con la que se ingresó al país la mercadería prohibida, que fue luego descargada en un camino rural del partido de General Belgrano.
En ese punto del interior bonaerense esperaban tres vehículos. En uno de ellos, un Volkswagen Tiguan, conducido por una mujer, se cargaron los paquetes de marihuana. Y en apoyo se encontraban otros dos vehículos, un Volkswagen Voyage ocupado por otros dos hombres y un Chevrolet Aveo conducido por Benítez.
La maniobra fue organizada para un viernes feriado y todos los involucrados -seis varones y una mujer- fueron detenidos en el momento. El hombre de la tierra colorada viajaba en uno de los automóviles que acompañaban al Tiguan donde estaba cargada la droga, es decir que era de extrema confianza en la estructura de la banda. Los imputados, a excepción del hombre nacido en la provincia de Misiones, son extranjeros (oriundos de Paraguay) y deberán afrontar penas, en expectativa, de hasta 20 años de prisión.
Fue absuelto en Encarnación
El paraguayo Cardozo Benítez al ser arrestado había fijado su domicilio legal en el barrio Ramón Carrillo de Villa Soldati, aunque también tenía otro en la Villa 1-11-14. Se manejaba con un DNI argentino de dudosa procedencia. La Justicia descubrió que tenía dos familias, una en cada casa.
También descubrieron que no era la primera vez que caía preso. En septiembre de 2012, la Policía paraguaya encontró una avioneta Cessna 182 en el Aeroclub Colonias Unidas de Itapúa: llevaba 558 kilogramos de marihuana. Al año siguiente y tras un juicio oral y público un Tribunal encarnaceno lo absolvió.