Tras una resolución de la Cámara de Apelaciones en lo Penal y de Menores la Justicia dispuso la excarcelación de los cuatro imputados por el crimen del sindicalista Pablo Sabino Achingo (57), quien fue asesinado el miércoles 7 de junio de 2017 en la capital provincial.
Fuentes del caso señalaron que dicha disposición fue enviada al Juzgado de Instrucción 1 de Posadas, a cargo del magistrado Marcelo Cardozo, el pasado 22 de diciembre.
Puntualmente, se supo que los camaristas de la Sala II, José López y Jacobo Mass, coincidieron al analizar los pedidos de revocatoria que hicieron los abogados de los cuatro sospechosos y finalmente dictaminaron que se agotaron los plazos razonables de la prisión preventiva que pesaba sobre los mismos, quienes seguirán vinculados a la causa.
En ese sentido, desde el mencionado órgano judicial hicieron hincapié en que la Fiscalía interviniente hasta el momento no pidió la elevación a juicio del caso, debido a que existen medidas de prueba pendientes. Además, durante el mencionado lapso en el que los imputados se mantuvieron tras las rejas, hubo apelaciones y presentaciones por parte de algunos de sus abogados para apartar al juez que sigue la investigación, lo que generó que la prosecución del proceso judicial siga dilatándose, consignó un vocero a este Diario.
No obstante la causa está prácticamente cerrada y con pocas medidas pendientes antes de ser elevada a juicio. Actualmente cuenta con cuatro acusados que deben responder por el delito de “homicidio en ocasión de robo”, según la calificación provisoria tras la instrucción, que para aquellos que son hallados culpables prevé de 10 a 25 años de cárcel.
El hecho
El crimen del sindicalista mercantil Pablo Sabino Achingo se conoció alrededor de las 6 del miércoles 7 de junio de 2017.
La víctima estaba quemada y tenía signos de haber recibido una golpiza. Su vehículo, un Renault Fluence, apareció incinerado horas antes de que hallaran su cuerpo tapado con plásticos en el cruce de las calles 127 y 82, en la chacra 130, en el barrio Santa Rita. Para los investigadores no quedan dudas de que Achingo fue víctima de un grupo de delincuentes que, bajo engaños, lo llevó hasta una vivienda de avenida Santa Cruz casi San Martín, donde fue atacado a golpes con fines de robo. La autopsia reveló que su deceso se produjo por inhalación de monóxido de carbono mientras ardía en la esquina mencionada.
Entre las medidas de prueba existentes en la investigación, además de testimonios, hubo toma de registros genéticos de los sospechosos que se cotejarán con las halladas en un vehículo en el que se cree trasladaron a la víctima, como así también análisis de teléfonos incautados y cruzamientos de llamadas entre los imputados.