
Durante poco más de una hora, María Ramona Ovando (46) y sus abogados brindaron al juez Correccional y de Menores 2 de la Primera Circunscripción Judicial, César Raúl Jiménez, sus motivos y razones por la que presentaron en diciembre pasado el recurso de habeas corpus para recuperar la libertad, luego de que dos meses antes fuera condenada a veinte años de prisión por el abuso sexual de dos de sus hijas menores edad.
El habeas corpus obliga al juez que lo recibe a mantener una audiencia de visu con la peticionante. En este caso y por las circunstancias que impone la pandemia de COVID-19 la medida debió realizarse por teleconferencia, con Ovando y sus defensores del la Unidad Penal V en Miguel Lanús y el magistrado y demás partes en su despacho de los juzgados correccionales de la avenida Centenario casi Santa Catalina de Posadas.
En la audiencia Ovando pudo ampliar su cuadro de salud y explicárselo al juez Jiménez. Según fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, la detenida remarcó que se agravó su patología diabética e hipertensiva.
Sus letrados por su parte, se explayaron sobre la situación previa al juicio oral de octubre 2020 ante el Tribunal Penal de Eldorado, al que Ovando llegó acusada pero en libertad, y como la sentencia formulada fue casada en el plazo previsto, el carácter de no firme del fallo debería beneficiarla porque durante la instrucción y hasta el debate la encartada “estuvo a derecho”, se presentó en cada citación judicial y no entorpeció el trámite de la causa.
Los camaristas Lyda Gallardo, Teresa Ramos y Eduardo Jourdan, integrantes del Tribunal Penal de Eldorado, condenaron a María Ramona Ovando en sintonía con la acusación del fiscal Federico Rodríguez, como penalmente responsable y “cómplice primaria de los abusos y partícipe o facilitadora de corrupción agravada por el vínculo”. Determinaron 20 años de prisión efectiva y ordenó su inmediata detención.
Además, los mismos jueces sentenciaron a dos allegados a Ovando, Marcos Laurindo y Lucas Ferreira, a 18 y a 12 años de cárcel, respectivamente. De acuerdo a la acusación y a la sentencia, las víctimas de los abusos sexuales fueron hijas menores de edad de Ovando en su vivienda de Eldorado.