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Con horario y movimientos precisos, cuatro hombres armados sorprendieron a un matrimonio y a un nieto de 11 años, blandieron sus pistolas, los ataron a los tres y dejaron bien en claro que su actitud no permitiría dilación ni engaños. Venían por dinero y no pensaban irse sin cumplir su objetivo. Las víctimas integran una familia de trabajadores agricultores en paraje Chafariz, sobre la ruta costera 2, entre El Soberbio y Colonia Aurora.
La banda irrumpió a las 23.30, integrada por robustos con tonada argentina, dos de ellos con pistolas calibre nueve milímetros en sus manos, vestidos con ropa oscura similar a la de los grupos comando de fuerzas de seguridad, uno de ellos con chaleco antibala, dos con gorras de lana, pero todos con barbijos colocados.
El propietario de la chacra (63) fue reducido de inmediato al ver la punta de una de las pistolas a centímetros de su rostro y en la mano derecha del cabecilla de más de 1,80 metros de altura, musculoso y que impartía las órdenes. La “otra nueve” la portaba otro sujeto alto y que apuntaba a su esposa de 59 años y al nieto de ambos.
Fueron atados los tres y los demás asaltantes cumplieron con su labor, armar el botín rápidamente. Hallaron todos los ahorros: 605.500 pesos y 400.000 reales.
Los pasos siguientes correspondieron a incomunicar a las víctimas, les arrancaron sus celulares y tomaron las llaves de un Volkswagen Gol Trend y las de “la chata”, una camioneta Ford F100, un rifle de aire comprimido y un revólver 38. Con el detalle, también repudiable, de que antes de huir se atrevieron a llevarse una caja con un par de mocasines de cuero marrón, talle 39, sin estrenar y que el dueño de casa compró pocas horas antes.
Los cuatro delincuentes subieron al Gol y desaparecieron raudamente. Antes de la fuga desataron a las tres víctimas pero con el amedrentamiento suficiente como para no intentar siquiera moverse hasta percatarse que la banda se había esfumado en la oscuridad.
Ya en la madrugada de ayer, pudo dar aviso a la policía. Arribaron los primeros efectivos desde El Soberbio y Aurora, jurisdicción de la Unidad Regional VIII, quienes brindaron contención a la familia e iniciaron el rastrillaje del Gol.
Ya con la luz del sol, fue hallado el automóvil a 500 metros de la casa asaltada. Lo abandonaron con las llaves puestas y arrojaron el rifle de aire comprimido a pocos metros. Las primeras pericias de la Policía Científica resaltaron huellas de camioneta en un trillo, detalle que abrió la hipótesis que escaparon en otro vehículo.
La búsqueda de los autores es intensa y abarca distintos puntos de la provincia.