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Una gran cantidad de camiones recorre la provincia de Misiones, provenientes de diferentes puntos del país, repletos de soja en sus acoplados, por efecto de la brecha cambiaria entre el dólar oficial y el informal más el impacto de las retenciones que alimentan las especulaciones y la evasión.
En los últimos meses, a través de diferentes operativos de las fuerzas de seguridad, fueron incautadas toneladas de soja transportadas de manera ilegal sobre las rutas nacionales que atraviesan el territorio provincial, con el fin de evitar el pago de tributos en el país.
Los motivos del secuestro de los camiones y de las cargas responden, principalmente, a que los transportes no figuran inscriptos en Misiones, que existe falta de capacidad económica que acredite la adquisición y/o propiedad de la soja por parte de los conductores y la inexistencia de las declaraciones juradas correspondientes, entre otras cuestiones.
Ante esto, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN, el expresidente de la Federación Agraria y referente de la organización Movimiento Arraigo, Pedro Peretti recordó que “el blanqueo de soja es un triángulo que viene desde la época de Vicentin, Macri, y que ya fue varias veces denunciado”.
“Creo que el problema del contrabando en la Argentina no es algo meramente policial, sino que es un dato de la macro economía del país. Es muy importante”, añadió.
Por ello, sobre el enorme volumen de granos que se envía ilegalmente al exterior, detalló que “hay estimaciones de organismos dependientes de Naciones Unidas que hablan de sobre, subfacturación, contrabando, evasión y demás, que ronda entre los US$25.000 millones y US$30.000 millones de dólares al año. Son estimaciones hechas por Naciones Unidas. Por eso es un dato al que hay que prestarle mucha atención porque la evasión en Argentina es brutal”.
Apuntó que “ahora se ve que hay una mejor acción de Gendarmería custodiando las fronteras, pero siempre lo que se descubre es el 10% de lo que realmente pasa”.
“Se descubrieron 36 mil toneladas, 1.200 camiones, cada camión lleva unas 30 toneladas, según el cálculo usual que se hace, durante todo el año del 2020, de acuerdo a las cifras oficiales que dio la secretaría de Seguridad de la Nación. Ahí se fue mucha soja sin declarar. Son las estimaciones que se hacen”, recalcó.
Organización criminal
Para Peretti esto se debe al accionar de “una organización criminal donde el negocio se perfecciona en el país. Ningún pequeño productor va con 3 camiones a la frontera para tratar de pasarlo. Venden en negro y una organización criminal los pasa a Paraguay”.
“Los pequeños productores no se van a arriesgar a mandar dos o tres equipos de contrabando. El modus operandi muestra que hay una organización criminal que actúa dentro de Argentina, que es la que arma las cargas, que compra, consigue la facturación apócrifa y las saca del país”, consideró.
“Mientras más se evade, más presión hay sobre el sector del campo. Si el gremialismo agrario entendiera que tiene que ponerse de acuerdo con el Gobierno, y juntos ir a controlar las rutas, y a las compañías transnacionales de granos, seguramente reduciría la presión fiscal sobre el sector primario”, sostuvo.
“Es una organización que tiene que estar vinculada con las compañías exportadoras de granos. Fueron 1.200 camiones ¿Quién los exporta? ¿Qué van a hacer con esa soja?”, se preguntó y afirmó: “Eso termina en los puertos privados que hay a la vera del Paraná. Es todo blanqueo de soja en negro, robada. Pasa por ahí”.
Vía terrestre y fluvial
El expresidente de la Federación Agraria también comentó a este Diario que “las filtraciones en las fronteras no se dan solamente de forma terrestre, también hay filtraciones acuáticas. Hay varios puertos sospechados, en la hidrovía nadie controla nada, es zona de nadie. Por eso creo que lo mínimo pasa por vía terrestre y lo máximo por vía fluvial”.
“Sucede con Paraguay y Brasil, depende de lo caliente que esté la frontera de un lado y del otro. Hay una porosidad en las fronteras tanto por vía terrestre o por agua y existe una complicidad de las compañías que exportan, porque ese cereal va a otros países, vuelve a la Argentina y se blanquea”, amplió.
Al ser consultado sobre las medidas que deberían implementarse para contener el contrabando de soja, Peretti destacó que “lo que se debe hacer es confiscar no solamente la carga sino también el camión”.
“Cuando se confisquen 50 o 100 camiones que hacen contrabando de soja y se rematen y el producido del remate vaya a favor de un hospital de niños o centro de salud, se reparte, ahí puede ser que merme mucho. Van a pensar dos veces antes de poner los camiones para eso”, sostuvo.
Sobre el volumen de granos que atraviesa las fronteras de forma ilegal, sostuvo que existe “vinculación de las compañías exportadoras”. El dirigente agrario manifestó que “mientras más se evade, más presión hay sobre el sector del campo”. “Los 1.200 camiones significan que los transportistas saben perfectamente lo que están haciendo, entonces hay que apretar las clavijas”, cerró.