
Evangelina González denunció que le negaron la inscripción, en un instituto adventista de Puerto Esperanza, a su hija a salita de cinco por tener síndrome de Down.
“El lunes fui a inscribirla a la escuela adventista porque pensé que era lo mejor para mi hija, pero cuando les dije que tenía síndrome de Down el director dejó de completar la planilla de inscripción y me dijo que no podían aceptarla porque la regla de su colegio no permitía que hayan más de dos chicos discapacitados y ya había un nene autista”, contó la mujer a PRIMERA EDICIÓN.
“No entendí la regla ni su reacción. Me dolió mucho porque nunca había tenido un problema de este tipo, hasta ahora. Lo único que quería era que mi hija tenga la mejor educación y me habían recomendado ese colegio, pensé que era una buena opción pero me equivoqué. Mi marido y yo ganamos lo justo para vivir pero íbamos a hacer un esfuerzo para pagarle la educación a mi hija”, relató.
Lo publicó en sus redes
Ante lo sucedido, Evangelina decidió registrar la conversación con el director y hacer su descargo en sus redes sociales. Inmediatamente recibió cientos de mensajes de apoyo e información para hacer la denuncia correspondiente. Además, desde el INADI “se comunicaron conmigo para acompañarme y ayudarme a hacer la denuncia al instituto”.
Por otra parte, aclaró que “por más que ahora se comuniquen desde la escuela para que ingrese mi hija, no lo voy a permitir. La discriminaron antes de que pueda inscribirse, no quiero pensar cómo la tratarían después”.
No hay especialistas
Según contó Evangelina “en Puerto Esperanza cuesta mucho encontrar a especialistas que estimulen a los niños con discapacidades. Todo está en Posadas y cuesta mucho poder viajar hasta allá. Mi hija necesita mucha contención y no puedo estar yéndome todo el tiempo porque tengo otro nene más chiquito. Cuesta mucho”.
¿Qué dice la normativa?
PRIMERA EDICIÓN habló con el presidente de la Fundación de Apoyo a Padres De Hijos del Espectro Autista (FAPADHEA), Eduardo Sisto para conocer las normativas que hay al respecto. “La primera normativa que hay que tener en cuenta y que es madre de todas las normativas, es la Constitución Nacional que garantiza la educación pública a todas las personas en la República Argentina. A partir de este derecho constitucional surgen las otras regulatorias que nunca pueden contradecir este derecho”, aseguró Sisto.
Recordó que “en el 2016 el Consejo Federal de Educación aprobó la Resolución 311/16 que resolvió propiciar las condiciones para la inclusión escolar al interior del sistema educativo argentino para el acompañamiento de las trayectorias escolares de los estudiantes con discapacidad” y agregó que “la provincia de Misiones fue la primera en adherirse a esta resolución”.
Escuelas de gestión privada
“Siendo la Argentina un país que promueve la educación inclusiva, no puede haber una resolución o normativa particular que limite esto y por más que se trate de una escuela de gestión privada, la educación siempre es pública, por lo que se debe aplicar lo establecido por la Resolución 311/16 y lo establecido por la Constitución Nacional, no puede ir en contra”, explicó Sisto.
Por lo tanto, “el directivo tiene que entender que sea la escuela que sea, tiene detrás suyo una institución que tiene el acompañamiento del Estado: hay un marco legal que los acompaña”.
Por otra parte, agregó que “constitucionalmente los padres pueden y son responsables de elegir la educación que consideren pertinente para sus hijos, en tanto y cuanto se adapten a las normativas nacionales. Pero cada papá puede elegir la educación para sus niños y es responsabilidad del Estado garantizar que esa educación no sea discriminadora y que promueva la calidad de vida, entre otras”.
Según explicó Sisto, las escuelas que reciben a chicos con discapacidad “tienen los elementos que les brinda el Estado para recurrir al gabinete y refuerzo de apoyo. Además no están solos, porque los niños deben estar acompañados de un terapeuta o tutor que los acompañe día a día en la escuela. Es decir que los papás tampoco pueden simplemente depositar a su hijo en la escuela, sino que es un trabajo que debe hacerse en conjunto”, dijo.
Las escuelas no aceptan a niños discapacitados
A pesar de las leyes y resoluciones vigentes, lo cierto es que el ingreso de un niño con algún tipo de discapacidad a una escuela de gestión privada, no es tarea sencilla.
“Nuestra fundación recibe muchísimas quejas, sobre todo en el interior de la provincia, de padres que son rechazados en las escuelas porque su hijo tiene alguna discapacidad. Cuesta mucho conseguir escuelas que los acepten. Los directivos simplemente les dicen que no pueden hacer nada por sus hijos”, aseguró Sisto.
Incluso, señaló que “hay muchas escuelas que ni siquiera están dispuestas a aceptar que vayan los terapeutas pero tienen la obligación de recibirlos. Hay muchas cosas que se pueden hacer para intentar acompañar al niño en las escuelas, como reducir la carga horaria o los días semanales, si es necesario. Lo único que no se puede hacer es negarle la educación”, concluyó.
Acerca de las escuelas especiales
Actualmente, las escuelas especiales “son un gran tema de debate porque antes mandaban a los chicos a escuelas especiales como única opción pero ahora es considerada como un complemento de la educación formal”, explicó Sisto.
En este sentido, dijo que “por ejemplo la Escuela Especial 64 con la que colaboramos desde la Fundación, busca lograr que los chicos con autismo se adapten a la sociedad. Entonces van tres veces por semana durante dos horas y trabajan en conjunto con las maestras, psicopedagogas, fonoaudiólogas y todo el equipo multidisciplinario para que el chico tenga un nivel de adaptación, pero ese mismo niño también asiste a la escuela normal. Es un complemento más que los educa pero se focalizan más en las particularidades de los chicos”.
Actualmente, en Misiones hay cerca de 65 escuelas con modalidad de educación especial.