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Hasta que no lleguen al despacho del juez de Instrucción 7, Miguel Mattos, los informes accidentológicos de la Policía Científica y Criminalística, y se analicen al detalle las circunstancias del trágico siniestro del domingo pasado en el centro de esta capital, el conductor de la unidad de de pasajeros perteneciente al “Grupo Z” que arrolló a Daniel Carlos Nelli (79) seguirá detenido e imputado por el delito de “homicidio”.
Fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN confiaron ayer que la fiscal de Instrucción 7, Patricia Inés Clérici, rechazó el pedido de liberar al chofer de la línea 7 de la empresa Tipoka.
Vale recordar que el imputado se se abstuvo de declarar el miércoles en indagatoria ante el juez mencionado.
Por consejo de su abogado defensor, optó por acogerse al derecho de guardar silencio y fue imputado provisoriamente en el marco de la figura penal señalada.
El juez Mattos aguarda que se completen los informes de criminalística para determinar con mayor precisión la colisión registrada el domingo, minutos antes de las 8, y que le costó la vida a Diego Nelli quien transitaba por la senda peatonal de la avenida Roque Pérez cuando fue colisionado por un colectivo que giraba en dirección a la calle Alberdi, sentido sur-norte.
Los análisis y factores que serán clave de los peritajes apuntan a la velocidad de la maniobra del transporte de pasajeros perteneciente a una de las empresas del denominado “Grupo Z”.
Tal como lo adelantó este Diario, las imágenes captadas por cámaras de seguridad son elocuentes en cuanto a que la víctima caminaba sin violar ninguna norma o restricción de tránsito y que el giro del micro es sorpresivo y, posiblemente, fuera de lo que indica la ley.
Estos informes pertenecen a registros del sistema de videovigilancia del Centro Integrado de Operaciones 911 de la Policía provincial y fueron incorporados al expediente. Hasta tanto no se presenten todos los informes accidentológicos, se estima que el conductor continuará privado de su libertad a la espera de la resolución de su situación procesal, que podría decantar en la acusación formal y resolución de la prisión preventiva.
“Conducción temeraria”
Entre las probables acusaciones la conducción imprudente está penada en el artículo 84 y 84 bis del Código Penal Argentino. Con mayor precisión indica que “será reprimido con prisión de uno a cinco años e inhabilitación especial, en su caso, por cinco a diez años el que por imprudencia, negligencia, impericia en su arte o profesión o inobservancia de los reglamentos o de los deberes a su cargo causare a otro la muerte”. En el 84 Bis se amplía: “Será reprimido con prisión de dos a cinco años e inhabilitación especial, el que por la conducción imprudente, negligente o antirreglamentaria de un vehículo con motor causare a otro la muerte”. “La pena será de prisión de tres a seis años (…) Si estuviese conduciendo en exceso de velocidad de más de 30 kilómetros por encima de la máxima permitida en el lugar del hecho o (…) Violare la señalización del semáforo o las señales de tránsito que indican el sentido de circulación vehicular o con culpa temeraria”.