
El inicio del ciclo lectivo en esta ciudad mostró varias caras. Por un lado, el esfuerzo de las comunidades educativas para acondicionar los establecimientos y recibir a sus alumnos, en función a los grupos organizados.
Por el otro, la continuidad de la virtualidad ante el faltante de recursos necesarios para brindar las normas de bioseguridad a docentes y educandos.
Por el paro de actividades de la agrupación Docentes en Lucha, en varias instituciones hubo una alta adhesión de su plantel a la medida de fuerza. No faltaron los reclamos por las condiciones edilicias inadecuadas para la situación de pandemia y la falta de personal de mantenimiento.
Los padres que decidieron llevar a sus niños a la escuela se mostraron conformes con la organización y aseguraron que los chicos estaban sufriendo por la situación e imposibilidad de ir a la escuela.
La empresa de transporte de pasajeros local, agregó unidades, pero no pudo evitar que los vehículos circularan atestados. A varias instituciones no les llegaron elementos de bioseguridad, por lo que se hicieron cargo los docentes.
Acto inicial
El inicio formal se desarrolló en la Escuela 237 de barrio Norte. El intendente Carlos Fernández, concejales y supervisoras, acompañaron al personal docente, directivos, padres, madres y estudiantes, en la jornada de ayer.
Al ingreso al establecimiento, fueron recibidos por promotores de Salud que se encargaron de tomar la temperatura e higienizar las manos. Posteriormente, se formaron para el izamiento de las banderas argentina y de Misiones. Luego los alumnos procedieron al ingreso a las aulas para comenzar con el dictado de clases.
Las mismas características tuvo la Escuela 185, mientras que en la 288 de Loma Porá, se adaptaron a las posibilidades y fue el personal el que montó la logística para recibir a sus alumnos.
En otras, como las Escuelas 304 y 305, prácticamente no tuvieron movimiento por ausencia de los docentes que decidieron adherir al paro y movilización.
“Comenzamos el 22 y trabajamos mucho en la organización, como para que el inicio fuera como el que tuvimos. Una jornada tranquila con padres organizados, conociendo las medidas como distanciamiento, uso de barbijo, etcétera” expresó la directora Ana Cristina Szworak.
“Vinimos el fin de semana a pintar las rayas en las veredas, acomodar el interior de aulas y también marcar los baños. El portero recibió a los chicos, como no tenemos termómetro el personal de servicio recibía a los padres para que mantengan la distancia. Las maestras los recibieron en la puerta ya, para que directamente ingresen a las aulas. No tenemos palabras para agradecer a las colegas por el trabajo y entrega. Tratamos de adaptarnos, los docentes ponen mucho de sí y ellos trajeron el alcohol, los rociadores, todo” afirmó.
La organización previa se ejecutó en la mayoría de los casos a través de Whatsapp. Las instituciones privadas utilizando plataformas virtuales tuvieron la puesta en marcha prevista por el Gobierno.
En virtualidad
Entre las instituciones que decidieron continuar con la virtualidad está la Escuela 633 de jornada extendida. “Por esta semana van a trabajar de manera virtual porque no están dadas las condiciones edilicias. Están trabajando en obras que no nos permiten darles seguridad a docentes y alumnos. Tenemos problemas de sanitarios y de agua” señaló el director Marcelo Poje.
“Seguimos trabajando con el protocolo, ya armamos las burbujas, estamos definiendo los grupos, pero por ahora las clases son virtuales. Me aseguraron que esta semana terminarían las obras, mientras no lo hagan no podemos permitir que vengan los niños” remarcó.
En la mayoría de los casos el plantel docente optó por grupos de alumnos que irán alternando la presencialidad por semana. También algunos ingresan y egresan a diferentes horarios para evitar aglomeraciones.
Escaso movimiento
Los establecimientos públicos secundarios mostraron escaso movimiento. En su gran mayoría por la medida de fuerza docente.
“No empezamos todavía. Si bien repararon sanitarios, institucionalmente decidimos empezar las clases el miércoles de la próxima semana, para dar la posibilidad a alumnos que no pudieron revincularse a que se pongan al día con los trabajos que les dieron sus profesores” expresó Patricia Gnass, directora de la Escuela de Comercio. Las bajas docentes, más allá del paro, son por COVID- 19 u otras afecciones que los convierten en grupo de riesgo.
Primeros pasos en Puerto Rico
En esta localidad las clases presenciales comenzaron a dar sus primeros pasos ayer, con un protocolo armado por cada institución de acuerdo a sus necesidades particulares.
El sector secundaria iniciaría la semana próxima pero la primaria inició la modalidad presencial con algunas divisiones, en tanto otras iniciarán la semana que viene pues el protocolo es alternar una semana presencial y otra virtual.
Las horas de clases también fueron reducidas y los días de clases presenciales de la semana serán 4, quedando un día liberado para la ayuda excepcional a algunos alumnos con mayor dificultad.
En cuanto a los protocolos, desde la Municipalidad aseguraron que el área de salud está ayudando a las escuelas a cumplir con todo lo necesario.
Por otro lado, afirmaron que ninguna institución requirió mucha reparación para el inicio de las clases, pero que desde la Municipalidad estuvieron asistiendo con la reparación de baños, techos, canaletas y fumigación.