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A un año del inicio de la pandemia causada por el COVID-19, los pasos fronterizos clandestinos con Brasil y Paraguay siguen preocupando. Más aún teniendo en cuenta las nuevas cepas del virus halladas en Brasil. El intendente de San Antonio, Fausto Rojas, en diálogo con Primera Plana, de la FM 89.3 Santa María de las Misiones la radio de PRIMERA EDICIÓN contó cuál es la situación en su localidad “acá tenemos varios casos y Brasil, acá enfrente está desbordado”, dijo.
También explicó que “estamos frente a Santo Antonio, y la gente cruza constantemente al otro lado por los pasos clandestinos, es incontrolable, acá cruzás un trillo y estás en Brasil, y la gente pasa constantemente para trabajar y además el cambio les favorece. A nosotros nos separa un hilo agua de Brasil, el río San Antonio, que es más como un arroyo, un hilo y son muchos kilómetros de frontera”, indicó.
El alcalde explicó que a pesar de los esfuerzos de concientización y de los pedidos de los cuidados “para que usen barbijos, el alcohol en gel, pero ya no prestan atención, ya ni piensan más en eso, las autoridades provinciales acompañan, pero la gente está cansada, y usa los pasos clandestinos, los trillos, para cruzar, no hay forma de controlar esto, estamos todos los municipios de las fronteras en la misma, tanto en Bernardo de Irigoyen, Comandante Andresito y San Antonio, la gente necesita ir a Brasil sobre todo a trabajar”, dijo Rojas.
Explicó que “al principio nosotros cerramos las rutas, trabajamos muy intensamente, pero se alargó tanto que la gente se hartó. Y las vacunas vienen medio lento, nosotros recibimos unas 350 vacunas, son pocas, tenemos unos 14 mil habitantes”.
Contó que en este tiempo con la frontera cerrada “algo del comercio se reactivó, se ven comercios por todas partes, y construcciones, igualmente acá en San Antonio tenemos muchos problemas, con el agua, con la luz, los proyectos que se elevaron a Nación no bajan, está todo bastante detenido en este sentido”, contó.
Además el alcalde indicó que “hay que estar atentos a lo que pasa con el virus en Brasil, los hospitales están desbordados, ya no tienen más camas, al menos es lo que sabemos sobre la situación de Brasil y eso es lo más preocupante”, indicó el intendente.
“Ya ni piensan en eso”
Rojas indicó que los vecinos “ya ni piensan en eso (por el COVID-19), pasó tanto tiempo que es como si se la gente se hartó. Nosotros seguimos insistiendo en el uso del barbijo y el alcohol en gel”, dijo.
Pasos por todo lados
El alcalde Fausto Rojas explicó que a ellos los separa de Brasil “un hilo de agua que es el Río San Antonio, son muchos kilómetros de frontera que se pueden cruzar caminando, por un trillo”.