El Uno o La Fuente se fractaliza a medida que va descendiendo desde la 36º dimensión donde se encuentra hasta llegar a la dimensión donde está la Mónado Yo Soy que se vuelve a fractalizar en, 12 mínimo y máximo 144 almas, de las cuales una es la tuya que te encuentras en la 3ª D.
Es debido a esto el infinito poder de nuestros pensamientos y sentimientos, ya que lo único que va reduciendo a medida que se fractaliza, es el voltaje, porque si el alma entrara a un cuerpo físico con el voltaje original o el de dimensiones superiores, se produciría una combustión instantánea.
Cuando Jesús dice Yo Soy el camino, está diciendo que el camino es Su forma de pensar-sentir y que es la que tendríamos que seguir si queremos ingresar al Reino. Entonces los distintos caminos son diferentes formas de pensar-sentir y según ellos sean, nos conducirán a diferentes destinos, Reinos o estados de conciencia.
Al ser creados a Su imagen y semejanza, o sea, ser fractales de Su conciencia, nuestros pensamientos tienen Su mismo poder de crear y lo hacemos las 24 horas, lo que nos hace responsables de crear el mundo que nos rodea y del mundo, ya que cada pensamiento que emitimos creará un posible futuro para nosotros e irá a engrosar el conjunto de pensamientos de igual vibración o tipo, que colectivamente refleja el mundo en que habitamos.
Mientras más seamos los que conscientemente elijamos la manera de caminar-pensar, ejercitando a diario el desenfocarnos de los diálogos mentales destructivos, siguiendo el método que cada quién sabrá cuál le es mejor para salir del pensamiento estereotipado y enfocarnos en los más elevados, más rápido accederemos a la Nueva Tierra, Reino de Amor o 5D de conciencia.
Empecemos ya a SOÑAR el mundo en que deseamos vivir. Seamos los guionista de nuestras vidas.