Con temor a que la inflación limite la recuperación tanto de la actividad económica, como del poder adquisitivo -dos grandes apuestas de la Casa Rosada para impulsar su resultado electoral en noviembre- el Gobierno nacional anunciará en los próximos días la extensión del programa de precios populares de carne. Sin embargo, en los próximos días se esperan aumentos del 10% en los mostradores.
Los precios de los distintos cortes de carne vacuna mostraron, en promedio, un aumento cercano al 7% en marzo y del 3,4% en abril, de acuerdo al informe mensual del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA).
La suba entre enero y febrero fue de 5,1%, por lo que en 2021 acumula un aumento mayor al 15%.
De esta manera, con respecto a los valores de abril de 2020, los precios del cuarto mes del corriente año se ubican un 65,3% por encima. En el mismo período, el pollo subió 44,2% y el cerdo avanzó 58,7%.
Hubo cortes que subieron por encima de ese promedio, como el asado de tira (81,5%), el matambre (76,6%) y el vacío (74,9%).
Por otro lado, el Índice Asado, que releva quincenalmente el sitio online del canal TN, detectó a mediados de abril que ya había cortes que en la Ciudad se vendían a $1.000, como el peceto, la colita de cuadril y el bife de chorizo.
De esta manera, el costo de la carne de vaca se incrementó más de 20 puntos por encima de la inflación acumulada en el último año.
Miguel Schiariti, titular de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (CICCRA), dijo a TN que “es muy posible” que haya un aumento de precios de la carne cercano al 10%.
“Si la oferta sigue escasa de animales para el consumo interno, seguramente ocurrirá”, advirtió. Este incremento de valores podría verse reflejado en las carnicerías en los próximos días de mayo, especificó.
En el mismo sentido, Leonardo Rafael, presidente de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), aseguró al mismo medio que “hubo un pequeño aumento” que todavía no se trasladó a precio en las carnicerías, sino que aún queda en cabeza de los matarifes, algo así como los “mayoristas” de la carne.
“La hacienda ha tenido una recomposición de precios y se necesita ese valor para seguir alentando la producción”, explicó.
En paralelo a estas fuertes subas en los últimos meses, el poder adquisitivo de las personas que trabajan en Argentina cae hace más de tres años. Por esta razón, en el primer bimestre de 2021 el consumo cayó un 10,5% con respecto al primer bimestre de 2020.
Pero, ¿por qué se espera que sigan aumentando los precios si cae la demanda? A diferencia de las subas por el aumento del consumo cercanas al 20% que hubo entre noviembre y diciembre, esta vez es un problema de oferta de animales.
“La oferta de ganado es muy reducida y encima llovió dos semanas seguidas por lo que ingresará menos hacienda. Si sigue la temporada de escasa hacienda, los aumentos que hubo en el mes pasado en el mercado de Liniers y todavía no se trasladaron llegarán a las carnicerías, con subas aproximadas del 10%”, explicó Schiariti.
Acuerdo trabado
El nuevo programa de cortes baratos de carne sigue trabado entre el Gobierno y los frigoríficos. Cuando se firme, aseguran, será similar al que funciona actualmente y que caducó en abril y el principal cambio sería que se agregarían dos nuevos cortes para pasar a ser diez, en vez de ocho.
Pese a que el objetivo del Gobierno con este plan, como con los distintos mercados ambulantes que circulan por el país con precios promocionales, es que sirvan como “precio de referencia”, Schiariti adelantó que el problema ocasionado por el aumento global del precio de las commodities seguirá habiendo aumentos.
Según varios medios, el acuerdo se dilata porque los frigoríficos piden un ajuste en los valores mientras que el Gobierno desea mantener las mismas condiciones.
En búsqueda de estabilizar los precios, el Gobierno ya anunció cambios en la comercialización minorista de carne, que deberá hacerse en trozos de 32 kilos como máximo. El nuevo programa de cortes de carne a Precios Populares volvería a estar firmado por los mismos actores, el principal el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC) que concentra el 80% del mercado.
Las carnicerías no forman parte del acuerdo de precios populares de la carne.
El ternero liviano que iba a feedlot tres meses pasó al campo
Desde el mercado de Liniers alertan que la baja oferta de hacienda “gorda” está presionando sobre los precios, de la misma manera que a finales del año pasado.
“Todos los años sucede que en épocas de zafra de terneros faltan animales gordos y la hacienda sube, pero este año está potenciado por la suba del maíz que obligó a cambiar la forma de engorde”, señaló Julio Boutet, especialista en sector ganadero. Desde el sector explican que el proceso de engorde corto de tres meses en feedlot se dejó de hacer por las importantes subas del precio del maíz y de la invernada, pero no de la hacienda más pesada.
Al encarecerse el engorde se comenzó a hacer un proceso de recría y desde ese momento comenzó a faltar hacienda. El ternero liviano, que iba a feedlot sólo tres meses, pasó a estar en un campo por un período más largo. Por esta razón, Boutet agregó: “Con el faltante que viene acumulado del año pasado, era esperable que los precios suban. Sucede todos los años y esta vez se potencia por el cambio en la forma de engorde. Este tiempo de más que está tardando la hacienda es el bache que hay de oferta”.
En este sentido, Miguel Schiariti explicó que “la oferta reducida para consumo interno continuará por tres o cuatro meses. Hasta el año pasado, cuando se separaba a los terneros de las madres directamente iban a un feedlot, por el aumento del costo del maíz ahora van a pasto. Los 100 kilos que antes aumentaban en 90 o 100 días, en pasto lleva ocho meses”.
Fuente: Medios Digitales