El próximo 25 de junio el directorio del Fondo Monetario Internacional analizará la propuesta de ampliación de los Derechos Especiales de Giro (DEG), un tema clave para la Argentina ya que, a partir del previsto incremento en el capital del organismo, el país podría engrosar sus reseras en divisas en 4.355 millones de dólares.
En unos días los directores ejecutivos del FMI discutirán una nueva asignación de derechos especiales de giro de u$s650.000 millones para ayudar a la recuperación mundial del COVID-19 y proporcionar liquidez adicional al sistema económico mundial complementando los activos de reserva de los 190 miembros del Fondo. La reunión del Board para discutir los DEG fue informado oficialmente en Washington.
Tras esta decisión, la iniciativa debe ser aprobada por la Junta de Gobernadores (los países miembros) del organismo con el 85% de los votos y aún no hay fecha para este encuentro.
A modo de referencia en el 2009 cuando también el FMI decidió una reasignación de DEG el proceso se inició en abril de ese año, en junio fue aprobado por el Directorio y a finales de julio lo hizo la Junta de Gobernadores. El desembolso se llevó a cabo a fines de agosto.
De donde, en medios internacionales se especula que probablemente los países podrían disponer de esos fondos para finales de agosto o principios de septiembre.
Los más de 4.000 millones de dólares que corresponden a la Argentina permitirán acercar recursos al país en momentos en que las reservas de divisas en poder del Banco Central se encuentran en niveles considerados muy bajos por los analistas.
Si bien en las últimas semanas el BCRA estuvo comprando dólares, cálculos privados estiman en torno de los 7.500 millones de dólares el nivel de las reservas netas (menos de dos meses de importaciones).
Al respecto, debe tenerse en cuenta que la Argentina adeuda 2.400 millones de dólares al Club de París, que vencieron el 31 de mayo pasado, y hacia fin de año se acumulan los primeros vencimientos importantes que tiene con el FMI por el préstamo stand by vigente, por unos 4.500 millones de dólares.
En oportunidad de anunciar la medida, la Directora Gerente del FMI, Kristalina Giorgieva, señaló que “al abordar la necesidad mundial a largo plazo de activos de reserva, una nueva asignación de DEG beneficiaría a todos nuestros países miembros y respaldaría la recuperación mundial de la crisis del COVID-19. También sería una señal poderosa de la determinación de los miembros del FMI de hacer todo lo posible para superar la peor recesión desde la Gran Depresión”.
Giorgieva también dijo que “el personal técnico del FMI desarrollará nuevas medidas para mejorar la transparencia y la rendición de cuentas en el uso de los DEG, preservando al mismo tiempo la característica de activo de reserva de los DEG. Asimismo, volvió a indicar que el organismo “explorará opciones para los miembros con sólidas posiciones financieras para reasignar DEG para apoyar a los países vulnerables y de bajos ingresos”.
La titular del FMI en esa ocasión aclaró que la propuesta que se presentará al Board estará “basada en una evaluación de las necesidades mundiales a largo plazo de activos de reserva de los países miembros del FMI”.
Argentina apuesta a recibir más DEG aunque se estima que los países desarrollados cederían una parte o quizás toda su ampliación de la cuota fondos que se estima será reasignada a los países más pobres. Cabe recordar que Argentina está considerada un país de ingresos medios.
En tanto, el Senado de la Nación aprobó un Proyecto de Declaración para solicitar que la próxima emisión de Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional (FMI) se aplique para financiar la puesta en marcha de políticas públicas destinadas a resolver los problemas derivados de la pandemia por coronavirus.
En general el destino de los fondos de los DEG son determinados por el Fondo y en este sentido Kristalina Georgieva anticipó en su momento que “esta nueva asignación supondría un refuerzo directo y sustancial de liquidez para los países, que no incrementaría su carga de endeudamiento. Además, liberaría recursos que los países miembros necesitan de forma apremiante para ayudar a combatir la pandemia”.
La negociación por el préstamo
Sin brindar precisiones, el Fondo Monetario Internacional (FMI) insistió en que trabaja en “estrecha colaboración” con la Argentina para llegar a un acuerdo de renegociación de una deuda por casi US$ 45.000 millones.
El vocero del organismo multilateral, Gerry Rice, dijo que ambos “se comprometieron a continuar trabajando juntos en un programa de apoyo del FMI que pueda ayudar a la Argentina y a los argentinos para enfrentar los profundos desafíos económicos y sociales que el país está encarando, agravados por el COVID- 19”.
Al ser consultado por la prensa respecto del informe de evaluación del FMI sobre el préstamo a la Argentina, ratificó: “El programa anterior con la Argentina pertenecía a la categoría de acceso excepcional, con la que habrá una evaluación”.
Sin embargo, aclaró: “No tengo fecha, pero publicamos los informes cumpliendo con la importancia de la objetividad y transparencia”.
“Cuando se lleve a término esta evaluación, se mostrará en su totalidad”, remarcó Rice.
Días atrás, el Gobierno había admitido que no iba a poder reestructurar la deuda por casi US$ 2.500 millones con el Club de París, si antes no alcanzaba un entendimiento con el Fondo.
La deuda vencida con el Club de París entró en un período de gracia hasta el 30 de julio próximo, y si la Argentina no soluciona ese pago ingresaría inevitablemente en default.
Fuente: Medios Digitales