
La situación hídrica tuvo una mejora en las últimas semanas en Bernardo de Irigoyen. Las lluvias generaron que el caudal de la represa, donde está la toma de agua, vuelva a crecer. Esto permitió que el suministro se normalice en aproximadamente un 70%; aunque todavía hay barrios que sufren la falta del líquido vital debido a que las napas de los pozos perforados no se recuperaron y algunos se secaron por completo.
En mayo pasado, la Cooperativa de Provisión de Agua Potable (COOPABIL) había mermado las horas de bombeo debido a que la represa y sus reservorios estaban casi secos. Es así que de 24 horas de bombeo continuo tuvieron que reducir a cuatro horas a la mañana y tres a la tarde.
Sobre la situación actual se refirió el presidente de la COOPABIL, Arlindo Pianowski, quien comentó a PRIMERA EDICIÓN que “actualmente la represa está con un lindo caudal por las lluvias que se registraron y se está bombeando bien”.
Destacó que se pudo normalizar en un gran porcentaje la distribución en el pueblo; y al mismo tiempo, sostuvo que “el problema que tenemos es que si en 20 días no se registran precipitaciones el caudal de agua de la represa baja muy rápido”
Asimismo, el presidente de la COOPABIL expuso que -más allá de las precipitaciones- “seguimos teniendo problemas en algunos barrios porque los pozos se secaron”.
Uno de los barrios más afectados es Vista Alegre, contó Pianowski. Deslizó que “hay un par de pozos que tienen muy poco caudal y sólo se puede bombear unos 6.000 litros por hora, pero eso no alcanza. Por eso, a esos lugares se los asiste con el camión de los bomberos y de la Municipalidad”.
Por otro lado, manifestó que “estamos esperanzados porque sale la licitación para una obra en el municipio y en los próximos días se estarían presentando los sobres”.
Se trataría de la construcción de una nueva represa. “Esto sería una solución para el pueblo”, remató.