Con la detención de tres hermanos de 24, 26 y 30 años, la policía dio avances importantes para esclarecer el robo del último lunes en el comercio dedicado a la fábrica y venta de bolsas plásticas ubicado sobre avenida Uruguay. Sin embargo, lo que desvela a la Justicia por estas horas es qué sucedió con el más de un millón de pesos que los maleantes lograron llevarse.
Están previstas las indagatorias a dos de los sospechosos para hoy y la restante el lunes. Tampoco encontraron las armas de fuego utilizadas en los diferentes allanamientos.
El juez de Instrucción 7 de Posadas, Miguel Mattos, tiene previsto en principio dos indagatorias para la jornada de hoy y que consisten en los dos primeros detenidos que arrojó la causa. Se trata de un hombre de 30 años que planificaba la venta del vehículo registrado en las cámaras de seguridad con el cual perpetraron el golpe, en una comunidad gitana y el joven de 24 años conocido como “Wiki”, apuntado como el cabecilla de la banda.
Justamente porque el hecho fue cometido presuntamente por tres personas, con distintos grados de participación, un agravante en la imputación podría ser el dispuesto en los artículos 166 y 167 del Código Penal argentino por el uso de armas de fuego y ser cometido por tres o más personas. La calificación provisoria en el expediente es de “robo calificado”, indicó una fuente consultada.
Las imágenes que registraron las cámaras de seguridad del comercio ubicado a metros de la comisaría Tercera, permitieron establecer la identidad de los posibles autores pero a su vez, el trabajo deslizado en redes sociales y de estricta vigilancia después, tanto de los uniformados de Cibercrimen como de la división Robos y Hurtos, dejaron el caso a un paso del esclarecimiento aunque el detalle del dinero sustraído no es menor y para los próximos días se esperan más allanamientos.
La policía mantiene sospechas que el trío de hermanos tiene más personas involucradas o que ofician de colaboradores para ocultar el dinero. No descartan detenciones incluso de su grupo familiar una vez que se concluyan las pericias en los celulares secuestrados en los operativos de detenciones y allanamientos. Más de tres aparatos están siendo revisados por los especialistas del área correspondiente.
El robo ocurrió el lunes entre las 15.20 y 15.40 cuando el local estaba cerrado a pocos minutos de iniciar la jornada vespertina. Es por ello que tampoco dejaron de lado la hipótesis de que en la trama delictiva haya un “entregador” o exempleado de la firma que conocía los movimientos del lugar, puntualmente apuntado a que en los inicios de semana se contaba con grandes sumas que luego eran depositadas en entidades bancarias.
Pero este detalle también tiene cierta lógica (mucho dinero a principio de mes) porque ocurrió en el rango de fechas en que generalmente se liquidan los sueldos al personal.