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Padres y alumnos del BOP 112 del Barrio de San Miguel de Oberá volvieron a convocarse este viernes, por segundo día consecutivo, frente al establecimiento educativo para exigir al Gobierno mejores condiciones para las clases de sus hijos, la construcción de la prometida escuela propia y el equipamiento necesario.
Según manifestaron, cansados de la precariedad en que sus hijos desarrollan el proceso escolar y las promesas incumplidas decidieron manifestarse y exigir a las autoridades la inversión que corresponde. “Nosotros llegamos y nos encontramos con la manifestación y el portón con cadena y candado. Los padres están cansados de esperar”, explicó el director, Daniel Buiak.
Según explicó, “los docentes cumplieron el horario, pero no pudieron ingresar a la institución. Nosotros entendemos esta reacción y sabemos que tienen razón, por eso estamos acá acompañando y tratando de que aparezcan respuestas”.
El BOP 112, tiene en la actualidad una matrícula de 200 alumnos, funciona de 13,55 a 21,40, ya que en el turno tarde tiene secundario común y en el turno noche, secundaria para adultos.
Utiliza aulas cedidas por la Escuela 184 de nivel primario, en un predio donde además funciona la Escuela para Jóvenes y Adultos 53.
Idas y vueltas
Según recordó su director, “en 2017 fuimos beneficiados por el Programa 700 escuelas de Nación, pero hubo problemas en la licitación y eso hizo que se diera de baja. Después de muchas gestiones, logramos que se hiciera cargo IPRODHA, se volvió a hacer la licitación y supuestamente debería estar en marcha”.
El BOP 112 tiene su propio terreno, “hicimos todas las gestiones por el terreno, es el que está atrás de la seccional quinta de la policía, sólo falta que se inicie la construcción. Ahora, dada esta situación, hablamos con el responsable de educación del Municipio, Pula Reinoso, y también las autoridades provinciales están al tanto, así que esperamos respuestas”, precisó.
Por su parte, los padres, se mostraron decididos a mantener la manifestación hasta obtener respuestas concretas. “Sabemos que los docentes hacen todo lo posible porque nuestros hijos estén bien, por eso entendemos que quieran ingresar y dar clases, pero no podemos permitir que sigan en condiciones tan precarias. Además el Gobierno no sólo nos prometió el edificio propio, sino que también habla de que todo está bien, queremos que vengan a ver cuál es la situación acá y dejen de decir mentiras”, expresó una madre.
Según precisó una de las docentes, Fanny Kaechele, “el Gobierno provincial nos prometió que para el segundo semestre de este año contaríamos con un nuevo edificio. En la actualidad ni siquiera contamos con un edificio propio, pues ocupados de prestado aulas de la escuela primaria desde hace unos diez años. Pero vemos que ya corre el primer mes del segundo semestre y no hay señales del Gobierno ni de una empresa constructora”.
Por eso, según indicó, “los padres decidieron sostener el reclamo por tiempo indeterminado y nosotros como docentes los apoyamos porque es un beneficio para toda la comunidad educativa”.