Diez meses atrás, precisamente el 1 de octubre de 2020, un hombre identificado como Daniel Eduardo de la Vega (44) era hallado asesinado en la vía pública. Apenas horas después detuvieron al sospechoso, quien se domiciliaba muy cerca del lugar del crimen. El registro de las cámaras de seguridad de la zona fue clave para su aprehensión. Sobre esta causa, todo indica que de no haber alguna objeción, está a un trámite de ser elevada a juicio.
Según pudo saber PRIMERA EDICIÓN, en los últimos días desde el Juzgado de Instrucción 3 a cargo del magistrado Martín Brites, el expediente fue corrido vista a la fiscalía. En principio ya no faltarían más elementos en la investigación. Es por ello que le fue remitida la consulta al fiscal Horacio Paniagua, para que opine si considera que ya no es necesaria alguna nueva prueba y ya se puede dar por cerrado el caso.
El sospechoso del crimen tiene 21 años y está imputado por el delito de “homicidio simple”, el cual estipula una pena de entre 8 a 25 años de prisión de ser hallado culpable ante un Tribunal. Aquella noche, cuando vecinos llamaron a la policía para alertar que había una persona muerta en la calle 1 de Mayo casi República Argentina, nada se sabía acerca de qué podía haber sucedido. Una gresca era la principal hipótesis. Daniel de la Vega esa madrugada se cruzó o se encontró con su matador en ese lugar. Recibió una puñalada que le ingresó por la base del cráneo y otras dos en la espalda a la altura de las cervicales. Murió sobre la vereda.
Sin datos del agresor, investigadores de la UR-V comenzaron a buscar los registros de las cámaras de seguridad y de allí sacaron los datos relevantes que permitieron identificarlo.
Con órdenes de allanamiento, los efectivos llegaron a una vivienda de la calle Correa Luna, a unas cinco cuadras aproximadamente del lugar del hecho, a la vuelta del hospital Marta Schwarz. Detuvieron al joven y secuestraron prendas de vestir y un celular.
Desde un primer momento descartaron que el hombre hubiera sido víctima de un robo, porque tenía consigo todas sus pertenencias.
Tres puñaladas
Cuando la policía lo encontró, el cuerpo tenía dos puñaladas y lo que parecía ser un golpe en la base del cráneo. Sin embargo la autopsia confirmó que también era una estocada de cuchillo que le llegó al cerebro.