
Mientras el juez que instruye la causa, Ariel Belda Palomar a cargo del Juzgado de Instrucción 1 de San Pedro, espera por las pericias telefónicas de la SAIC, durante los últimos días declaró un testigo directo del homicidio del abogado entrerriano ocurrido el 14 de mayo de 2021 en el barrio Santa Rita a cien metros de la frontera con Brasil.
Se trata de otro abogado y socio de la víctima que lo acompañaba instantes previos a que lo balearan dentro de su camioneta Ford Ranger gris en inmediaciones de su departamento.
El testigo ratificó en sede judicial lo que había declarado en la policía y aseguró, de acuerdo a fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, que se bajó del vehículo a fumar un cigarrillo y hablar por teléfono mientras esperaban a otros amigos.
Escuchó ruidos de una motocicleta que se posicionó del lado del conductor (camioneta) y uno de los dos ocupantes abrió fuego con una pistola en al menos tres o cuatro ocasiones. Salvo uno de los disparos, todos dieron en la humanidad del letrado.
En ese momento observó como los presuntos sicarios abandonaron la zona en una motocicleta Honda de color negra u oscura (puede ser azul) y cruzaron la frontera. “Ya no respondía y estaba en los asientos de la parte de atrás”, señaló quien se presume era amigo y socio.
Belda espera contar en los siguientes días con las pericias telefónicas de los celulares secuestrados en la causa, el de la víctima, de su colega y otras personas que formaban parte de su entorno en Bernardo de Irigoyen donde trabajaba, ya que era oriundo de la localidad de Chajarí, Entre Ríos.
La familia de López aún no realizó notificación de que se presentará como querellante en la causa y solamente remitió el pedido de restitución del vehículo y documentaciones y elementos personales del abogado conocido como “El Chapo”.
El entrerriano fue asesinado durante el mediodía del jueves 14 de mayo en el barrio Santa Rita a cien metros de la frontera seca entre Bernardo de Irigoyen y Brasil. De acuerdo a las primeras versiones que surgieron, la víctima tenía domicilio fiscal en Puerto Iguazú pero trabajaba en un estudio con colegas en Irigoyen.
También investigan la versión de que el hombre asesinado se dedicaba al comercio de vinos entre Misiones y Brasil por lo que no descartan que el hecho tenga relación a un posible “ajuste de cuentas”.
Respecto a los autores, otros testigos señalaron en su momento versiones similares a la que dio en estos días el supuesto socio del abogado asesinado. Resta establecer las conversaciones que mantuvo López y sus allegados en días y horas previas al homicidio para determinar el móvil del crimen.