Comienza con algo, date una esperanza no todos los días sucede lo mismo. Cada día es un renacer, comienza y termina de acuerdo a un ritmo universal, son iguales en esencia pero diferentes en contenido.
Comienza con algo, anímate a ser la página en blanco y deja que sea la vida quien te acerque el libro a descifrar, el amigo a compartir, los lugares a descubrir, el momento a disfrutar.
Comienza con algo y no te detengas, la vida se cuida a sí misma y está en marcha. Encuentra y ocupa tu lugar, ese donde hallarás tu fuerza plena.
Disfruta, mira el cielo, no todos los días hay paz en el corazón. Aprovecha los momentos, siente el gozo de estar dentro tuyo.
Comienza con algo, no quieras todo, el camino es largo y más largo el sendero hacia la verdad.
Marcha tranquila, no hay prisa. Ya viste la ausencia y saliste de ella. La ausencia de paz, la ausencia de amor, la ausencia de Dios y encontraste.
Comienza con algo. Pon la mente en alto, busca la luz, ella está dentro de ti, sigue la vos que comenzara a habitarte, ella es tu conciencia. Hazte responsable.
Tu cuerpo es más lento. Tu mente es más rápida. Busca el corazón que los une…él es el puente regulador. Siente, siente y despertarás tu alma, ella es el Maestro en nosotros.
Deja que te hable, que te inunde, que te guíe. Confía, ya has despertado.
Comienza con algo, busca una buena lectura, sonríe más a menudo, disfruta las plantas, siente la vida y las buenas cosas.
Comienza con algo y no te detengas, ya te has puesto en marcha vive la vida. Solo haz la experiencia, no es necesario hacerlo perfecto, está permitido equivocarse, que nadie te juzgue, solo tú sabes qué llevas dentro. Acepta el destino y cambia de a poco, algo cada día, camina derecha la mirada al frente, permite que el aire circule en tu cuerpo, que nada se estanque, no te detengas.
Comienza con algo, acepta el destino y luego elige cambiarlo. Ya te has puesto en marcha, llegó tu momento y ahora sabrás cuáles son los pasos para ir hacia dentro, ahí está la guía.