El Día Internacional del Derecho a la Blasfemia se conmemora cada 30 de septiembre desde hace 15 años para incentivar a los individuos a expresar abiertamente su postura hacia las distintas religiones… e incluso despreciarlas.
La fecha elegida recuerda el aniversario de publicación -ese día de 2005– de una docena de caricaturas de Mahoma en el diario de mayor tirada de Dinamarca, el Jyllands-Posten, que de esa forma decidió romper el tabú de que la imagen del profeta no era reproducible.
¿Qué es una blasfemia?
La palabra blasfemia es un término empleado para ofender o insultar todo lo relacionado con la religión o aquello que se considera sagrado para los pueblos. Es una palabra de origen griego que significa injuriar.
Asimismo, la blasfemia puede representar un acto ofensivo para desprestigiar la reputación o el nombre de una persona.
Es importante aclarar, que hay países donde la blasfemia es considerada un delito grave que puede acarrear consecuencias como la cadena perpetua o inclusive la pena de muerte.
La mecha de la discordia
Lo cierto es que la decisión del diario danés, de ideología de centro-derecha, despertó una gran polémica dentro del país –algunas de las viñetas vinculaban el Islam con el terrorismo– y también tuvo graves repercusiones diplomáticas a nivel internacional, sobre todo con el mundo musulmán, al punto de que en 2006 fueron atacadas y saqueadas las embajadas de Dinamarca en varios países e incluso murieron varias personas en los incidentes.
Como contrataque a estas posturas radicalizadas de sectores del islamismo a la publicación de caricaturas es que en 2009 el Center for Inquiry, una organización estadounidense que promueve la ciencia, la razón y los valores humanistas, decidió impulsar este Día Internacional del Derecho a la Blasfemia.