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Con mucha alegría y felices por la respuesta de la gente, la familia Montenegro conformada por Salvador (5 años), su papá Joaquín y su mamá Silvana Benítez, consiguieron casi en tiempo récord, juntar los fondos para comprar los nueve nebulizadores a partir de la iniciativa de sortear la moneda de 1 peso con el error de la leyenda de “Provingia” en su impresión.
El último domingo PRIMERA EDICIÓN publicó una nota contando la particular historia, que comenzó con el pequeño Salvador quien abrió su alcancía para ver si tenía una de las monedas de las que tanto se habló en las últimas semanas en el país y la sorpresa fue enorme porque efectivamente encontró una. Acostumbrado a los gestos solidarios, aceptó la iniciativa de su papá de sortear dicha moneda entre la gente que colabore para poder reunir los fondos y adquirir los nebulizadores que irían directamente a nueve merenderos de Posadas y Garupá.
“Estamos muy agradecidos con todos los que colaboraron. Empezamos el jueves a la noche en las redes sociales y el lunes alcanzamos el monto que necesitábamos. Incluso recibimos el apoyo de Droguería Avenida que nos hizo un descuento y la noticia es que con el monto recaudado en vez de nueve podremos comprar trece nebulizadores de los cuales diez serán para los merenderos de Posadas y Garupá”, explicó Joaquín Montenegro, en diálogo con PRIMERA EDICIÓN.
Destino interior
Los otros tres nebulizadores, irán para “Oberá, donde nací; otro para San Vicente, donde me crié y el restante a Jardín América, donde me ‘malcriaron’. Junto a mi familia queremos agradecer a toda la gente que nos escribió en estos días, a todos los misioneros, a la sociedad en general, a los empresarios, al Estado y a PRIMERA EDICIÓN”.
Joaquín agregó que “debemos entender que la unión y el trabajo en equipo nos va a llevar a cosas más importantes. Hoy estamos en una etapa de nuestro país en la que necesitamos estar todos unidos y seamos más solidarios, darnos una mano uno a otros para poder salir adelante y construir el futuro que queremos todos”.
Los Montenegro le ponen mucha pasión a las actividades solidarias, aunque prefieren mantener el bajo perfil porque así es como se sienten más cómodos, “haciendo y no prometiendo”, aunque a veces, como en el caso de los nebulizadores, ante la repercusión que tuvo la movida tuvieron que salir a “enfrentarla” y ser partícipes directos, por el bien de los chicos carenciados, quienes serán los directamente beneficiados con estos aparatos.
“Estamos súper contentos con el apoyo de todos porque cuando hay que ser solidarios y ayudar al prójimo hay gente que entiende muy bien de qué se trata, está en el gen de los argentinos y no hay que perder tiempo con el tema de la famoso ‘grieta’ porque eso no suma nada, al contrario resta y lo más preciado es precisamente el tiempo, porque cuando nos damos cuenta ya estamos del otro lado y se termina la vida”, reflexionó.
En la misma línea dijo que “en lugar de mirar para otro lado podemos darle una mano al que verdaderamente lo necesita y nos hará más feliz, porque les aseguro que nos puede sacar una lágrima o un llanto de felicidad una acción de este tipo y te genera una satisfacción interna que no tiene precio”.
En cuanto a los siguientes pasos y para cerrar esta particular historia, Joaquín dijo que “me entregarán los nebulizadores el jueves y allí los llevaremos a los diferentes merenderos. También haremos el sorteo para ver quien se gana la moneda y el dibujo que realizó mi hijo Salvador”.