Productores recibieron plantines de árboles frutales mediante el Programa de Consolidación de Cuencas Productoras de Frutas Tropicales. Los frutales trabajados a través del programa son maracuyá, banana, palta y mango, siendo estos los que actualmente presentan la mayor demanda tanto en mercados locales como en nacionales.
En el municipio de Dos de Mayo se entregaron 2.200 plantines a siete productores, además de microcréditos para la adquisición de fertilizantes y enmiendas para los cultivos.
El Programa se lleva adelante desde la Subsecretaría de Desarrollo y Producción Vegetal del Ministerio del Agro y la Producción que desde el 2020 trabaja en alianza con viveros locales, entre ellos Viveser y Biofábrica SA, para propagación de especies frutales de forma tal de poder brindar a los productores los plantines adecuados a la zona y que se adapten a los requerimientos del mercado. Cabe destacar que, los plantines que se utilizarán son de origen conocido y de genética de calidad, ambos factores claves para una producción exitosa.
En este sentido la subsecretaria de Producción Vegetal Luciana Imbrogno señaló que “se trata de cultivos con planificación a largo plazo. Los plantines frutales deben encargarse a los viveros con un año de anticipación. Este es uno de los factores que impide que los productores puedan encausarse en la producción frutícola. Entonces, desde el Ministerio del Agro llevamos adelante esta planificación y aseguramos la provisión de material de propagación para quienes quieran iniciarse en la actividad o ampliar su producción. Ese es uno de los valores a destacar en este programa”.
El Programa de Consolidación de Cuencas de Frutas Tropicales alcanza a 29 productores que optaron por diversificar su producción con frutales y pertenecen a diversos municipios de la provincia: San Javier, Dos de Mayo, Colonia Alberdi, Colonia Aurora, San Vicente, Candelaria, Gobernador Roca, El Soberbio, Aristóbulo del Valle y Jardín América.
El plan de trabajo contempla la distribución de un total de 8.000 plantines, para incrementar la oferta de productos locales como incentivo también a la permanencia en las chacras y el arraigo.
La premisa de este programa es que los lotes no tengan riesgos de heladas a fin de que los frutales puedan desarrollarse. Los sitios seleccionados son adecuados para el desarrollo de los cultivos además que, representan zonas estratégicas para la comercialización de estos productos pudiendo ser su formato en fresco como industrializado.
En este punto, la directora de Fruticultura Paula Sánchez Kunin remarcó ante los productores de Dos de Mayo que “desde el área de fruticultura del Ministerio del Agro se fomenta la extensión del cultivo de frutales a nivel provincial para que los productores puedan abastecer a la provincia y a mercados nacionales”.
La entrega de plantines consiste en un eslabón dentro de las actividades que se iniciaron con la selección de productores, aptitud del terreno para los cultivos, acceso al agua, formalización de productores mediante la inscripción en el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios en SENASA, y acompañamiento técnico en la preparación de suelo y confección de estructuras de sostén.
En este encuentro con los productores de Dos de Mayo, estuvieron presentes además Analía Mango directora general de frutihorticultura, Eduado Auras director de horticultura, Marcelo Carballo técnico territorial del Ministerio del Agro y Susana Rodríguez responsable de la Casa el Colono del municipio de Dos de Mayo.
Todo por hacer en Misiones
Hay algunas ventajas comparativas que posee la provincia para el desarrollo de un entramado frutícola-industrial. Tres muy importantes:
1 – Las condiciones de clima y suelo permiten el cultivo de especies que actualmente se están importando. Esto permitiría obtener rápidamente una cuota de mercado para ser cubierta por fruta producida localmente.
2 – La ubicación geopolítica estratégica de la provincia. Permitiría avanzar en la exportación hacia centros de consumo de países limítrofes. Además, la distancia de Misiones a los grandes centros de abasto argentinos que hoy importan estas frutas es mucho menor.
3 – El valor de la tierra está por debajo del promedio respecto a otras zonas del país.
De la misma manera, se plantean las principales dificultades para llevarlo a cabo:
• Falta de viveros para las implantaciones frutales correspondientes
• Falta de infraestructura para cosecha, poscosecha, almacenamiento e industrialización.
• Falta de líneas crediticias para fomentar la actividad.
• Limitada difusión de la información sobre las oportunidades de mercado y comercialización en fruta fresca y procesada.
• Reducida asistencia técnica especializada en la temática y escasa tecnificación.
• Escasa cooperación de carácter público-privado para articular, fomentar y apoyar al sector.