
Paso trascendente y necesario para el servicio de justicia en la provincia se concretó ayer con la jura de nueve jueces, fiscales y vocales de cámaras de distintos fueros y circunscripciones. Autoridades de los tres poderes del Estado misionero tomaron juramento a los nuevos funcionarios. Ayer se transformó en flamante Fiscal del Tribunal Penal 2 de la Primera Circunscripción Judicial, Antonio Vladimir Glinka.
Tal como lo adelantó PRIMERA EDICIÓN oportunamente, el nuevo fiscal es posadeño, casado y padre de dos niñas, tiene 31 años y se transformó en el funcionario, de tamaña importancia, más joven de la provincia.
Tras el acto de juramento en el Palacio de Justicia, Glinka dialogó con este Diario para describir sensaciones e intentar vislumbrar el desafío que, formalmente, arranca el próximo martes 30 de noviembre.
Hasta acá el trajinar fue de mucho esfuerzo, estudio, examen y paciencia. ¿Y ahora, qué se viene?
El proceso fue muy largo. Comencé en mayo (2021) a rendir. Fueron muchas horas de pensar lo que tengo que enfrentar y hacer. Mi intención es empezar con toda la fuerza, hay muchas expectativas y objetivos por cumplir. Trato siempre de analizar qué puedo ofrecer ante cada situación y para este desafío tengo claro que voy a arrancar con todas las ganas. Hay mucho por ordenar y resolver, porque fueron varios años de subrogancias en esta fiscalía y cada subrogante aplicó su forma de trabajo. Yo lo que voy a encarar ahora es tomar lo bueno de todo lo que se hizo hasta el momento, continuarlo y modificar lo que sea necesario y se pueda corregir.
Muchos expedientes, mucho trabajo le espera…
Trabajo atrasado hay y no lo voy a negar, pero son puntos que se van a resolver con organización. En poco tiempo vamos a estar al ciento por ciento. Con los camaristas del Tribunal (Penal 2) en este lapso mantuve reuniones y diálogo pero hasta que no asumía oficialmente no podía tomar decisiones. De todas maneras se avanzó en varios objetivos que a partir de ahora los iremos alcanzado. Tanto con el fiscal subrogante como con los jueces hubo sintonía plena y eso lo vamos a prolongar. Aprendí que la forma de trabajar es en conjunto y el próximo martes lo vamos a comenzar a demostrar.
Asume el cargo en medio del debate por la aplicación o no de las prisiones preventivas para imputados. ¿Qué postura tendrá?
La discusión por la aplicación de la prisión preventiva se transformó en una problemática mediatizada y en este punto es muy importante remarcar que la prisión preventiva es un instituto que implica la restricción anticipada de la libertad sin sentencia, su interpretación tiene que ser restrictiva. Aplicar o usar la prisión preventiva está muy bien, es necesaria pero por supuesto, por sus características está mal abusar de la utilización. Cada caso es particular y requiere de igual trato antes de aplicar la prisión preventiva. No me parecen correctas las prisiones preventivas largas, se pierde el carácter del instituto cuando ya se convierten en penas anticipadas. La prisión preventiva es controvertida por esencia, muy importante a la vez pero peligrosa si se alargan y superan los plazos que establece la ley. Dictar una prisión preventiva conlleva la obligación, la responsabilidad de que debe resolverse rápidamente.
¿Imaginó, se planteó este desafío como actor central en la Justicia misionera?
Sí, hace no mucho tiempo me puse a pensar qué camino quería seguir en la Justicia. El Derecho Penal siempre me gustó y apasionó por momentos. Creo que encontré mi personalidad en este cargo, lo que debo hacer en esta función. Yo no me inscribí en otros concursos para ver si en alguno salía primero. Yo me inscribí en este y le puse todo lo que pude, estaba seguro que era mi oportunidad. Es lo que me gusta, la oralidad y el derecho penal, y en este lugar voy a poder hacer las dos cosas.
Los que juraron ayer en el Palacio
Además del fiscal Glinka, a partir del martes 30 de noviembre estarán en funciones Diana Cristina Locjko como vocal de la Cámara de Apelaciones en lo Civil, Comercial, de Familia, Violencia Familiar y Fiscal Tributaria de Posadas; Pedro Benito Piriz, juez de Instrucción de San Ignacio; Martín Rubén López, juez de Primera Instancia en lo Civil y Comercial 3 de Posadas; Cecilia Alejandra Pérez, jueza de Paz en San Javier; Belén Gilda Helin, jueza de Paz de Montecarlo; David Ezequiel Augusto Milicich, agente fiscal de la Fiscalía Correccional y de Menores 1 de Oberá; Pablo Ignacio Otero, defensor oficial de Primera Instancia Civil, comercial, Laboral, de Familia y Violencia Familiar de Garupá y Juan Fernando Ramírez, defensor oficial de Primera Instancia en lo Civil, Comercial, Laboral y Violencia Familiar de Puerto Rico.