Según avanza el ritmo de vacunación por todo el mundo, los diferentes organismos siguen estudiando todos los detalles sobre COVID-19 para tratar de erradicar el virus. Una tarea compleja en el que tiene mucho que ver las citadas vacunas y donde se estudia también qué efectos pueden dejar en las personas. Así, las últimas investigaciones han desvelado que hay hasta tres nuevas consecuencias que pueden surgir del uso de los tratamientos de Pfizer y Moderna.
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha informado en los últimos días que hay hasta tres nuevos efectos secundarios que podrían surgir del uso de las dosis de Pfizer-BioNTech y Moderna. Eso sí, dejando claro que aún se sigue investigando la asociación entre estos trastornos y la vacuna, los nuevos nombres a los que habrá que irse fijando son eritema multiforme, glomerulonefritis y síndrome nefrótico.
Tres posibles efectos secundarios que se suman a los ya conocidos por la población, como son el cansancio, dolor en el lugar de la inyección, cefalea, escalofrío o fiebre.
Eritema multiforme
Este síntoma notificado en algunos casos consiste en una reacción de hipersensibilidad alérgica, con lesiones cutáneas de forma redondeada. También puede afectar también a las membranas mucosas de las cavidades internas del cuerpo.
Glomerulonefritis
Detectado también en pequeños casos, la glomerulonefritis consiste en la inflamación de los pequeños filtros de los riñones. Es decir, quedan dañados los órganos encargados de eliminar el exceso de líquido, los electrolitos y los desechos del torrente sanguíneo.
Síndrome nefrótico
Por último, el otro efecto notificado es un trastorno renal que causa que los riñones pierdan excesivas proteínas en la orina.