El hombre de 40 años, detenido hace una semana en el barrio Industrial de Comandante Andresito, fue trasladado ayer al Juzgado de Instrucción 3 para la audiencia indagatoria frente al juez Martín Brites, quien investiga un presunto hecho de violencia familiar. El sospechoso no declaró y se notificó de la imputación “Lesiones graves” y continuará tras las rejas.
El caso trascendió la semana pasada cuando un niño de 2 años y seis meses fue internado en el hospital de Andresito luego de ser golpeado aparentemente con un martillo en la cabeza, lanzado en principio por su padre y que tenía como destinataria a la madre del menor.
La víctima sufrió hundimiento de cráneo y se recupera, aunque tendrá más de 60 días de tratamiento. De acuerdo a las primeras hipótesis del hecho y a algunos testimonios, su progenitor intentó lastimar a su madre lanzándole la herramienta que el niño no pudo esquivar. El episodio de violencia familiar extremo fue denunciado por una médica del hospital de esa localidad que asistió al niño el sábado 12 de febrero.
Efectivos de la Unidad Regional V recibieron informes del hospital de Comandante Andresito que sostenían que el menor debió ser trasladado al Hospital Pediátrico Fernando Barreyro de Posadas, por la gravedad de la lesión en el cráneo producto de ese golpe. El juez dispuso allanamiento y detención del sospechoso de inmediato.
Fuentes consultas por PRIMERA EDICIÓN, indicaron que la madre del niño, presuntamente por temor, dio una primera versión accidental del episodio. Manifestó que el mismo se golpeó al caer de una escalera. Luego que sufrió el golpe cuando su padre trabajaba con un martillo y la cabeza se desprendió del mango accidentalmente.
Pero un vecino alertó en el propio hospital de Andresito sobre una discusión y pelea en la vivienda del niño y que el ahora detenido le arrojó un martillo a su esposa, que el menor no pudo esquivar. La causa fue caratulada provisoriamente como “lesiones graves”.