
Sus muy buenas actuaciones con la camiseta del Força Lleida de la Liga LEB Oro de España y un crecimiento sostenido en su juego, llevaron al misionero por adopción Juan Ignacio Marcos a ser convocado por el entrenador nacional Néstor Che García para la última ventana FIBA. Si bien quedó afuera de la lista definitiva, Juani es uno de los proyectos más interesantes del baloncesto nacional.
El base de 1,90 metros mantuvo una entrevista con la secretaría de Prensa de la Confederación Argentina de Básquetbol (CAB). Allí repasó su carrera y contó que sueña con vestir la camiseta de la Selección Argentina mayor.
“Siempre estoy soñando con eso. Estuve en una larga lista de preseleccionados, pero no me ilusioné por demás porque no hubo un contacto formal. Sé bien que debo seguir trabajando con la misma mentalidad, y cuando la oportunidad llegue estaré preparado para darlo todo. Representar a tu país es algo único, lo disfruto muchísimo, es dar hasta el último esfuerzo por dejar tu bandera lo más alto posible”, afirmó el exbase de El Coatí de Eldorado.
Juani comentó que un momento doloroso en su incipiente carrera fue cuando quedó afuera del Mundial U-17: “El momento en que me comunicaron que era el jugador número 13 me afectó y dolió bastante. Recuerdo que estábamos a punto de entrenar, recibí el llamado con la noticia y, cuando salí del vestuario, rompí en llanto. Por supuesto que entrenadores y compañeros me contuvieron al instante, pero lo sufrí mucho. Con el tiempo lo pude entender y concluí que si seguía trabajando tendría más oportunidades, que por suerte llegaron. Aceptar que no siempre se gana es fundamental para el crecimiento”, sostuvo.
Sin embargo, al poco tiempo tuvo revancha en el torneo FIBA Américas 2018 en Canadá. “Habíamos ido a los ODESUR con la U18 justo una semana antes, y a los tres minutos del primer partido salí lesionado por un microdesgarro del cuádriceps. Entonces dudaba de cómo estaría para el Mundial, y al primer juego ante Canadá llegué con lo justo, con algunas molestias. Pero se dio aquella situación en la que -todavía no sé bien cómo- me iluminé y convertí cuatro triples en un minuto y medio, no entendía lo que estaba pasando. En ese torneo me terminé de insertar en el grupo, fue espectacular”, recordó el joven nacido en Rosario pero que, de muy chico, se afincó con su familia en la tierra colorada.
Sus inicios con la naranja
Juani también tuvo tiempo para repasar sus inicios con la pelota naranja. “Empecé a los dos años y medio. Obviamente, no tengo recuerdos de esa primera etapa, pero siempre me cuentan que tenía un entrenador de casi dos metros que me daba mucha impresión por su altura. Jugué en Rosario hasta los seis años, en Náutico y Libertad, luego nos fuimos a Chaco donde conocí el básquet profesional ya que la Primera de Española jugaba el ex-TNA, y desde ahí nos mudamos a Misiones, cuando comenzó a dirigirme mi papá”.
En ese instante, el joven recordó una anécdota: “Teniendo tal vez 12 años pero jugando para la U15 de El Coatí. Iba trasladando la pelota, me viene a presionar mi defensor, me da un manotazo en la boca, y siento que se me sale un diente. Entonces, mientras con una mano seguía picando, con la otra me sacaba el diente de la boca. Me acerqué hasta el banco de suplentes donde estaba papá, le dije ¡tomá!, y se lo di. Me quedé mirando sin saber lo que pasaba”.
Juani es uno de los referentes de la camada 2000 y seguro pronto cumplirá su sueño de defender la Albiceleste en la selección mayor.
La actualidad de Marcos en Força
Juani forma parte de un equipo revelación como el Força Lleida en el que promedia 7.7 puntos, 1.7 rebotes y 2 asistencias en 20.3 minutos. Y al repasar su actualidad contó que “me siento muy bien, me dan mucha confianza, me dejan fluir y que disfrute de todo esto. Al ser una ciudad no tan grande, se vive como si fuéramos una gran familia”.
“Esperar la ciudadanía costó mucho, fue duro, porque en una cuestión burocrática no tenés idea cuándo se resolverá. En mi caso, me dijeron que para octubre de 2021 tendría todo listo, pero debí aguantar hasta enero de 2022”, detalló el base.