Más de 50 organizaciones confluyeron en Capioví, para consolidar un frente provincial socioambiental en defensa de los bienes naturales, el agua, la biodiversidad, la posesión ancestral de los territorios del pueblo mbya guaraní, la cultura, la soberanía alimentaria, la agricultura familiar y ecológica y el turismo sustentable para los ciudadanos de Misiones.
Provenientes de distintos sectores y edades, unas 80 personas se hicieron presentes a en el espacio verde del Salto Capioví y tras las palabras del cacique Ricardo Benítez Vera, de la comunidad Tunaí, de Puerto Leoni, invitando a “hablar con seriedad, escuchando al corazón”, esto es: comprometidos con el Ser, se dio inicio a la jornada.
“Frente a la gravedad de la situación de deterioro y pérdida de la biodiversidad, que repercute negativamente en todos los ámbitos, nos propusimos dar solidez a este espacio amplio, plural, inclusivo y democrático, que sigue abierto a más participantes y propuestas; un espacio sagrado, espiritual y profundamente político porque es de todos”, manifestó Gerardo Segovia, referente del Movimiento por las Semillas Campesinas de Misiones.
Un borrador tentativo de un manifiesto, guía del incipiente frente socio ambiental provincial, fue distribuido entre los presentes. Ese documento – disparador de temas a atender- fue el eje de trabajo en grupos, y tras el almuerzo, se concretó una asamblea donde cada grupo expuso sus conclusiones y en base a ello, se definieron líneas de acción con la mirada puesta en el próximo encuentro.
Repensar el modelo productivo vigente fue una de las premisas compartidas. “La demanda de bienes y servicios ecosistémicos aumenta sin pausa y a la par su disponibilidad disminuye, con el agravante que se acrecientan los eventos climáticos extremos, como la reciente sequía y olas de calor, que impactan directamente en la salud, en la producción de alimentos y en la disponibilidad de agua y de suelo fértil, con incendios de magnitud, como está ocurriendo en Misiones y Corrientes”, advirtió Raúl Aramendy, impulsor en la educación superior en agroecología e integrante del Frente Ciudadano Ambiental Kaapuera.
“Es evidente que el modelo productivo, donde impera el monocultivo de exóticas, no es compatible con la biodiversidad y nuestro bienestar. Entonces, hay que tomar otro camino”, expresó, quien además representa al Servicio de Paz y Justicia.
Mario Borjas Vera Miri, de la comunidad Kaa Kupe, de Ruiz de Motonya, consideró que el encuentro “fue un paso muy importante”. Ponderó que “nos encuentra la unidad con distintas organizaciones en la preocupación por lo socio ambiental”, al tiempo que adelantó que el manifiesto será evaluado en su asamblea tradicional, el Aty Necheyro.