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El pasado 27 de noviembre, un joven de 26 años era asesinado de un hachazo y por ese hecho había sido detenido su excompañero de trabajo de nacionalidad brasileña. La investigación avanzó rápidamente y a menos de cuatro meses del hecho el expediente está cerca de cerrarse para ser elevado a juicio.
La víctima, Santiago Simón Müller, fue hallado dentro de una precaria vivienda de madera con una lesión gravísima que lo mató prácticamente en el acto. La policía no tardó en detener al sospechoso, un hombre de 52 años conocido en la zona como “Ari Bicho”.
Según pudo saber este Diario, a fines de febrero el Juzgado de Instrucción 3 de Puerto Iguazú a cargo del magistrado Martín Brites, le dictó la prisión preventiva por el delito de “homicidio simple”, el cual de resultar una condena en juicio al sospechoso podría caberle entre 8 y 25 años de prisión.
Previamente, el acusado primero se abstuvo en indagatoria y luego solicitó ampliar su declaración. Cumplidos los pasos legales pertinentes este último lunes el juez corrió vista a la fiscalía para que opine si es necesaria alguna medida adicional, o si ya todo está en condiciones para que el ministerio público solicite la elevación a debate.
El caso ocurrió en Paraje El Pesado, ubicado a unos 12 kilómetros de la localidad de San Antonio. La policía tomó conocimiento de la muerte de un hombre en horas de la noche. Cuando llegaron al lugar constataron el hecho y tuvieron los primeros testimonios para determinar quién había sido el autor.
Las versiones indicaban que Müller estaba reunido con algunas personas y en un determinado momento se sumó “Ari Bicho” y lo acusó directamente de haberle robado. “Vos me robaste mi plata” le espetó y luego le dio un hachazo que lo mató prácticamente en el acto. Nadie atinó a detenerlo y el supuesto agresor escapó hasta que lo detuvo la policía en una chacra cercana.
En los primeros días de diciembre pasado, fue trasladado al juzgado para indagatoria y se negó a hacerlo. Una vez que se sumaron más pruebas al expediente, el defensor oficial solicitó una nueva audiencia que se llevó a cabo en enero.
En esa oportunidad “Ari Bicho” relató que conocía a Müller porque él había trabajado anteriormente en la misma chacra, pero por problemas con su patrón ya no realizaba labores allí.
En su versión dijo que Müller llegó donde él estaba y directamente le dijo que le iba robar la plata y después se iba aprovechar de él. Siempre según el relato del acusado, comenzó a forcejear y luego de quitarle dinero Müller alcanzó a bajarle los pantalones. De esa manera, para defenderse del supuesto ataque tuvo que golpearlo con el hacha para evitar que cumpliera el supuesto cometido.