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En pocos segundos y registrados por cámaras de seguridad, una mujer de 60 años perdió todos sus ahorros en manos de un ladrón durante la noche del miércoles 16 de marzo en su vivienda de Colonia Guatambú, jurisdicción de Montecarlo.
Denunció que un hombre con el rostro cubierto ingresó y de la caja fuerte empotrada en su dormitorio escapó con 150 mil dólares y 550 euros. Un botín en pesos argentinos superior a los 31 millones.
Los investigadores de la Unidad Regional III de Eldorado avanzaron al día siguiente e identificaron de las grabaciones presentadas por la denunciante al presunto autor del robo. Un joven de 29 años que tres meses antes conducía una motocicleta y arrolló a un peatón. Por el siniestro vial sufrió lesiones de gravedad en su pierna izquierda y quedó disminuido para caminar. Esta descripción sumadas al resto de sus características físicas apuntaron a que es allegado a la empleada doméstica de la vivienda donde se concretó el robo.
Descripción
La renguera, la fisonomía física y la ropa puesta no dejarían dudas de quien se trataría, por lo que los efectivos de la comisaría de Montecarlo citaron a la empleada doméstica para colaborar con la pesquisa. Su coartada no habría resultado convincente y por orden emanada desde el Juzgado de Instrucción 1 de Eldorado, se solicitó su detención o demora supeditada a la causa.
Mientras esto ocurría, los investigadores ampliaron la búsqueda para ubicar y detener al presunto autor del millonario robo. Pero al menos hasta anoche, no se obtuvieron datos suficientes para lograrlo.
Tampoco surgieron datos suficientes que conduzcan a recuperar el dinero. Como tampoco rastros del revólver calibre 38 marca Taurus que la víctima guardaba en la caja fuerte.
No obstante, fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, confiaron que la investigación se mantiene y que al menos el presunto ladrón será atrapado y deberá aportar una versión sólida para despegarse de las imágenes que captaron las cámaras de seguridad durante las doce horas de ausencia de la viuda de 60 años.
Pero no se puede soslayar que, si el dinero -o parte del botín- no aparece, al esclarecimiento de lo denunciado no se podría arribar.