El conflicto entre el Consejo de Administración de la Cooperativa Eléctrica Limitada Oberá (CELO), y los operarios del Sindicato de Luz y Fuerza, continúa, con la queja de socios que padecen algunas consecuencias.
“El paro es por tiempo indeterminado”, afirmó el secretario Gremial, Julio C. Adorno.
“No pudimos avanzar en algún canal de diálogo, por el contrario, el presidente redobló la apuesta con amenazas de descuentos de haberes, baja de contratos, cambio de jefaturas. Hasta ahora no tenemos un canal de diálogo sencillo con esta persona. No nos queda otra forma de presión que la medida de fuerza”, señaló.
El despido de un delegado del gremio, es base del reclamo. “No se cumplieron los procedimientos legales. La tutela sindical es un orden institucional que tiene el trabajador” recordó.
El conflicto lleva más de una semana, con cinco días de paro total, lo que hace crecer los reclamos de socios que sufren inconvenientes con los servicios y no encuentran respuestas en la cooperativa. Ante esa realidad, el Consejo solicitó, a los socios, que radiquen una denuncia ante la fuerza de seguridad más cercana, cuando no encuentren solución en las guardias, que por Ley deben mantener los empleados.
La compleja situación encuentra a las partes firmes en su postura. “Alguien tiene que aflojar. Esperamos la decisión de la justicia, el cien por ciento del consejo está de acuerdo en no reincorporarlo. No hay quiebres en el consejo, el empleado cometió un delito y ya se presentaron a la justicia todas las pruebas”, expresó Pedro Andersson, presidente de la cooperativa.
“Hay muchos reclamos, por eso le pedimos al socio que se acerque a la policía y haga una exposición o denuncia, para tener prueba, la guardia debería atender. Después vamos a evaluar cada caso, alguien debe hacerse cargo”, sentenció.