Luego de dos años de transmisiones por streaming, anoche el público volvió a llenar de aplausos y emoción compartida la plaza central de la reducción San Ignacio Miní situada en la localidad homónima. La celebración comenzó con la Misa Popular de las Misiones, a las 19, seguida de dos shows que fueron transmitidos por la TV Pública: la versión coreográfica de la “Misa Criolla” y la presentación del compositor Nahuel Pennisi, quien cantó hasta pasadas las 22.30.
“Es muy emocionante volver a hacer cosas con la presencia del público de manera real, no sólo virtual”, destacó el ministro de Cultura, Joselo Schuap, quien celebró además que la jornada artística y religiosa se haya ganado su espacio en la agenda nacional.
La actividad estuvo organizada desde la Provincia, a través del Ministerio de Cultura, el Ministerio de Turismo y el Parque del Conocimiento. Además de los titulares de cada área, el vicegobernador Carlos Arce estuvo presenciando el show, junto a otros miembros del gabinete.
Una misa con color popular
Ya desde la tarde la plaza se fue colmando de gente, y ni el clima fresco fue obstáculo para que la comunión entre público y artistas pudiera darse.
“Esto lo realizamos en conjunto con el padre Sebastián”, contó el director Juan de Dios Rivas al bajar del breve escenario en el que se ubicó el ensamble “Nuestras raíces”, que hace tres años se constituye exclusivamente para esta noche especial, convocado desde el Ministerio de Cultura. En efecto, se trata de una reunión de profesionales de la Orquesta Municipal de Posadas, la Orquesta Folclórica de la Provincia y la Orquesta del Parque del Conocimiento, además de otros músicos, que interpretan los temas que dan relieve a la Misa de Jueves Santo, que se desarrolla en el escenario principal.
“El guión lo arman desde la Iglesia, y entre ambas partes vamos decidiendo qué temas poner”, explicó el director. Baneirao, rasguido doble, chamamé y gualambao son algunos de los ritmos que dan color local a la celebración del ritual cristiano que presidió el obispo de Posadas, Juan Rubén Martínez.
“Estamos felices, todo salió como lo planeamos”, dijeron los músicos al bajar del escenario y recibir las felicitaciones de sus allegados. En esta oportunidad, quienes pusieron la voz a las letras compuestas y arregladas por músicos misioneros fueron Claudia Torgen, de Montecarlo; Loreley Benítez de Oberá y los hermanos Juan y Roli Rolón, del dúo “Salamandra”.
La danza y la música
Finalizada la misa, el escenario principal quedó libre para el despliegue coreográfico de la “Misa Criolla”, versión coreográfica del maestro Luis Marinoni, con el Ballet Folklórico del Parque del Conocimiento. El público se dejó maravillar por cada uno de los cuadros y escenas de esta “Mater lacrimosa” (Madre que llora), con más de 20 bailarines en escena, y efectos sencillos pero muy eficaces, como el uso de velos y telones translúcidos.
Más tarde, apenas pasadas las 21, subió a escena Nahuel Pennisi, guitarrista, compositor y cantante autodidacta, quien demostró su capacidad de enamorar multitudes. Nahuel conectó rápidamente con la gente, pidió estribillos y acompañamiento para algunos temas y celebró poder compartir esta experiencia.
“Estar acá me hace sentir…. en un universo paralelo”, dijo en un momento, arrancando la exclamación de toda la plaza, que sabía que se venía un de sus recientes hits: “Universo paralelo”. Con su llamativo estilo para sacar sonido a la guitarra –apoyada en la falda- y acompañado de una excelente banda de músicos, Pennisi se ganó el corazón del público con chamamés y temas especialmente sensibles a la fecha, como “pescador de hombres”.
Por supuesto, todo el espectáculo estuvo enmarcado por el portal de la reducción, destacado por una planta de luces que le daba tintes diferentes a cada momento. Asimismo, dos pantallas laterales permitían al púbico acceder a primeros planos de los artistas.
Presencia destacada
Con esta actividad, se repitió el ritual de la gente acercándose a la reducción desde varios puntos de la provincia, acarreando sus silletas y algún “avío” para disfrutar en familia tanto del show, como de la mágica escenografía que ofrece el lugar.
En esta oportunidad, tuvo clara presencia una delegación del Centro de Rehabilitación para personas Ciegas y con Baja Visión “Santa Rosa de Lima”. “Hace tiempo queríamos poder participar de un evento cultural y es la primera vez que lo pudimos lograr, gracias a Fernando Rosa, de la Dirección de Inclusión para Personas con Discapacidad, del Concejo Deliberante y a Cultura de la Provincia”, contó la director del centro, Noemí Aguirre.
Detalló asimismo todos los aspectos que hubo que considerar para realizar este viaje, iniciando por proveer información clara del espacio al que iban a acceder, además de la logística, incluyendo a las familias.