Nuevamente los cultivos de maíz y soja enfrentan riesgos en el inicio de la siembra. Los colonos de la zona productiva vienen enfrentando pérdidas hace varias temporadas y ahora la preocupación está dada en que los registros de humedad vuelvan a ser inadecuados.
“En Misiones ya se sembró alrededor del 60% del ‘maíz temprano’, como se dice en la jerga de los productores y necesitamos que vengan más lluvias para un mejor desarrollo”, contó a PRIMERA EDICIÓN el pequeño productor de maíz Diego González.
“El año pasado los productores tuvimos una pérdida muy importante, la mayoría casi lo perdió todo por causa de la sequía y ya son varias temporadas así. Estamos expectantes de que las condiciones meteorológicas acompañen en este momento clave”, enfatizó.
Manolo Durk, otro productor dedicado a la siembra a escala de maíz y soja contó: “Ahora justamente estoy terminando de preparar los lotes para iniciar con la siembra. Las condiciones del clima me estuvieron retrasando un poco. En esta semana ya que tuvimos algo de precipitación en la zona pensamos comenzar ya que ayudaría mucho para la germinación”.
Adrián Pérez, otro colono dedicado al maíz también contó sus preocupaciones a este Diario.
“El año pasado la sequía nos llevó a perder toda la siembra prácticamente”, recordó el hombre, uno de los mayores productores de la zona de Colonia Aurora.
“Ahora nuevamente nos estamos arriesgando a plantar, porque otra opción para nosotros no hay”, se consoló el productor (ver recuadro).
Pronostican déficit de precipitaciones
Entrevistado por este Diario, el especialista de INTA Cerro Azul, Adrián de Lucía, brindó explicaciones para un adecuado manejo para desarrollo y el rendimiento.
“Este es un año particular porque venimos de una campaña Niña, de moderada a fuerte, y la sequía que ha provocado causó mucho daño el verano último”, dijo.
Y remarcó: “Si bien hubo una recuperación del caudal de lluvias durante marzo, debemos decir que a partir de junio volvieron a registrarse precipitaciones por debajo de lo esperado que para colmo se profundizaron en julio”.
“Los pronósticos trimestrales, que van hasta septiembre, y que abarcan toda la época de siembra del maíz va a tender a seguir con déficit de precipitaciones”.
“La preocupación está dada en que en la mayoría de los casos, los productores perdieron la totalidad de sus cultivos de soja y maíz. Va a seguir instalado en la región un fenómeno muy similar a La Niña y por ello estamos pidiendo a los productores que se ajusten a sembrar en base a pronósticos a corto plazo”, puntualizó.
“Les sugerimos a los colonos no ‘jugarse’ a sembrar por cuestiones culturales, es decir en esas fechas preestablecidas culturalmente, sino que esté atento a los cambios meteorológicos, de lo contrario se arriesga a perderlo todo otra vez”, alertó el experto.
Lo más afectado
Cuando hay condiciones de déficit hídrica los cultivos de soja y maíz son los más afectados. Requiere un suelo húmedo gracias a las lluvias previas a la siembra o que haya un pronóstico de buenas lluvias una vez plantados.
“Igual nos arriesgamos”
Si bien la escasez de precipitaciones que se anticipan no serán tan crudas como lo fueron en el verano, los productores siguen viendo con preocupación el problema de la escasez hídrica.
“Yo perdí todo, lo que fue soja, no quedó nada de las tres hectáreas que planté. Con el maíz me pasó casi lo mismo”, fue el relato del productor Adrián Pérez, quien para no perder se anticipó en la siembra.
“El cultivo de la primicia del maíz suele ser bueno, tratamos de no arriesgarnos fuera de fecha, que sería la época de noviembre y diciembre. Los productores que vivimos de esto no podemos bajar los brazos. En su mayoría estamos viendo de plantar sólo en nuestro suelo, a menor escala y no alquilar chacras vecinas, como solemos hacer porque ya no podemos soportar otra cosecha fallida”, remarcó.