El 14 de octubre de 1992 fallecía el famoso relator argentino José María Muñoz, el “Gordo”, también conocido como “El Relator de América”.
Dueño de un estilo muy particular, le cambió la dinámica a la forma de hacer periodismo deportivo en radio. Desde 1952, cuando su voz emocionada transmitió desde Helsinki la victoria olímpica de los remeros argentinos Capozzo y Guerrero, por casi cuatro décadas Muñoz monopolizó la audiencia deportiva del país a través de “La Oral Deportiva”, el programa que conducía por Radio Rivadavia.
Inventó casi todo en materia de transmisiones deportivas radiales. Dejó frases célebres que la afición futbolera no olvida, como “peligro de gol”, “se mueve el cemento”, “córner número…” y el inolvidable grito de “golygolygolygol”…
Quienes lo conocieron lo definen como un obsesivo intransigente con el trabajo, incansable y resultaba imposible seguirle el ritmo, lo demostró hasta el último suspiro.
Desde su lecho de enfermo, estaba agonizando y realizó la apertura y el cierre del Superclásico Boca-River disputado en la Bombonera por el torneo Apertura ’92.
Además de estar presente en todas las Copas del Mundo desde Suecia 1958 y en todos los Juegos Olímpicos desde el mencionado Helsinki 1952, fue la voz del campeonato mundial ganado por la Selección Argentina en 1978.