No prosperaron los pedidos de los defensores que alegaron que nadie reconoció a Cristian “La Roca” Braganza (32) y que Dante Bergese (31) directamente no estuvo en Oberá el 9 de marzo de 2020 cuando ocurrió el asalto por más de dos millones de pesos a los dueños de un Pago Fácil. La fiscalía pidió casi el doble de la pena que finalmente fue fijada por el Tribunal Penal de esta ciudad.
La audiencia que comenzó el pasado jueves prosiguió hoy con la declaración de dos testigos. Luego la fiscal Estela Salguero inició la etapa de alegatos donde ratificó que estaba probada la participación de ambos.
“El Ministerio Público Fiscal tiene por acreditado que el hecho ocurrió con todas las características aportadas y perfectamente corroboradas. ¿Quiénes son los autores, si nadie los pudo identificar, dado que usaban lentes, pasamontañas y guantes?”, se preguntó.
“Indudablemente nadie los pudo identificar, nada más los testigos aportaron las características físicas. Cabe resaltar que esas características coinciden con las de los imputados. ¿Son Braganza y Bergese los autores? sí lo son. Porque según dijo el testigo Maximiliano Javier Albino Da Rosa, en sus tres declaraciones ratificó cómo los conoció y cómo entró en confianza con Braganza y así le preguntó si era verdad lo que decían (del robo) y que le respondió afirmativamente además de decirle que él, Dante Bergese y otras dos personas cometieron el hecho y agregó que eran una banda grande y el que pensaba era Cristian Braganza”, subrayó la fiscal.
“El testigo que declaró hoy, ratificó que se enteró que Bergese había participado en el hecho. Los supo en una reunión de amigos, donde comentaron que habían hecho el robo del Pago Fácil. Contó detalles, que fueron a comprar droga y que fueron con un bolso lleno de billetes de baja denominación, el mismo tipo mencionado por la víctima que habló de billetes chicos, que era la recaudación de tres días. Les llamó la atención que ese día se desplazaban en un Gol trend, y no en el Bora que siempre usaba Bergese. En esa declaración dijo que siempre estaban rodeados de delincuentes y andaban en cosas raras”.
Al final de su argumentación solicitó para ambos imputados la pena de 11 años de prisión por el delito de “robo calificado por el uso de arma blanca y por el uso de arma de fuego, cuya aptitud para el disparo no pudo ser determinada”.
“Dicotomía de dos injusticias”
Nicolás Ochoteco Rousseau, defensor de Braganza, comenzó su alegato con mención a los dueños del Pago Fácil. “Son víctimas que no pudieron superar un hecho tan impactante. Comentamos los recaudos de seguridad que tenían pero también se puede decir que hubo cierto descuido de parte de ellos, pero soy defensor de la idea de que la gente debe vivir en paz y tranquila. Pero el daño respecto a estas víctimas ha ido más allá. Considero que el sistema inmunológico de la señora se vio debilitado producto de esta situación. Hoy nos enteramos que el día que se define esta causa ocurrió su fallecimiento”, lamentó.
“El Tribunal se encuentra ante una situación en la que puede condenar a los acusados o absolverlos. Es una dicotomía odiosa porque si se los condena se cometerían dos injusticias, una contra los acusados, porque no existen pruebas con suficiente cargo incriminatorio respecto a la presencia del acusado Braganza en el lugar del hecho. Y se estaría engañando a las víctimas al decirle que se encontró al responsable. El conocimiento real de los autores no se pudo dar porque estaban con las caras cubiertas”, destacó el defensor.
“La investigación falló en la etapa de instrucción. Me baso en los testimonios de los testigos como el caso de Nolasco, que dijo “me buscaron varias veces y me preguntaban por Braganza”. La fiscal quiso vincular por error o maliciosamente la presencia de Braganza con las características físicas que describieron los testigos”.
“Si hay la más mínima duda de la presencia de Braganza no puede haber condena”. Solicitó la absolución y subsidiariamente, también la absolución por el beneficio de la duda.
No estuvo
Pablo Fester, defensor de Bergese alegó: “Mi defendido no estuvo involucrado ni estuvo en el lugar del hecho”, subrayó.
“En la declaración de uno de los testigos este señaló que pasó al lado de un Bora. Uno de los ocupantes estaba con pasamontañas y el otro a cara descubierta. La fiscalía supone que era Bergese el que estaba con el rostro cubierto. El testigo declaró que vio el rostro del chofer y no lo reconoció a Braganza, entonces, significa que él no era el que manejaba. Ese testigo dijo que volvería a reconocer al chofer si lo viera. No reconoció a Braganza ni a Bergese como esa persona. No hay como ubicarlo, porque nadie lo vio ni nadie lo reconoce en el lugar del hecho. Sostengo la inocencia de mi defendido porque estuvo en Posadas cuando ocurrió el hecho”.
Luego que la audiencia pasara a un cuarto intermedio pasado el mediodía, a las 17 prosiguió el debate y minutos antes de las 18.30 el Tribunal conformado por Francisco Aguirre, José Pablo Ribero y Jorge Erasmo Villalba regresaron a la sala con el fallo.
Resolvieron condenar a Cristian Adrián Braganza y Dante Fabricio Bergese a la pena de 6 años de prisión al hallarlos co-autores penalmente responsables de “robo calificado por el uso de arma blanca y arma de fuego, cuya aptitud para el disparo no pudo ser acreditado”.