Un muchacho de 27 años que, se presume, regresaba a su casa tras los festejos en el centro de Oberá por la victoria y pase a semifinales de la Selección Argentina en el Mundial de Qatar, fue atacado a punta de cuchillo por un vecino del barrio Villa Günther. Pocas horas después, falleció en el sector Emergencias del Hospital SAMIC.
Paulo Ignacio Rodríguez fue interceptado pocos minutos antes de las 22 sobre la calle Marambio, zona del barrio Yerbal Viejo. Se cruzó con “Gordo”, de 29 años, quien no le habría dado tiempo a nada, ni una reacción defensiva desplegó porque las estocadas en abdomen y pecho fueron rápidas y precisas.
La pelea fue corta, “Gordo” huyó con el cuchillo tipo carnicero y la ropa con manchas de sangre.
Mientras que Paulo Rodríguez se puso de pie y corrió hacia el Comando Centro de la Unidad Regional II, a pocos metros del lugar del crimen. Allí, mientras aguardaban una ambulancia que lo llevara al hospital, denunció a su agresor, con identidad y domicilio, según manifestaron las fuentes a PRIMERA EDICIÓN.
Corrieron las horas y el presunto autor de las lesiones no había sido ubicado, situación que se agravó para los investigadores policiales porque diez horas después desde el centro de salud se confirmó que Paulo Rodríguez falleció por la gravedad de las heridas en órganos clave que derivaron en un neumotórax.
De inmediato se solicitaron órdenes de allanamiento para atrapar al denunciado como atacante. Efectivos de la comisaría Segunda por jurisdicción intervinieron en la pesquisa y procedimientos autorizados desde el Juzgado de Instrucción 2 de la Segunda Circunscripción Judicial.
“Gordo” fue atrapado finalmente y se le secuestró un cuchillo de 30 centímetros similar a los utilizados en los cortes de carne.

El arma blanca fue puesta a disposición de la división Policía Científica para ser peritada y determinar si conserva restos que permitan un cotejo genético con las muestras de la víctima fatal.
El juez de Instrucción 2, Horacio Alarcón, ordenó que los restos de Rodríguez sean trasladados a la Morgue Judicial de Posadas para que se determinen las causas del deceso.
A la par, también el juez solicitó que el presunto autor del homicidio fuera alojado en una celda de la seccional Segunda para ser llamado a indagatoria una vez que la pericia forense esté concluida e incorporados sus adelantos al sumario policial. Culminada esta etapa, llamará a indagatoria al detenido para escuchar su coartada y establecer una imputación provisoria.

Las mismas fuentes remarcaron a este Diario que los testigos de la pelea y puñaladas no fueron pocos y algunos de ellos asistieron a Rodríguez para que llegara al destacamento del Comando Centro.
Se intenta establecer además si el tiempo que habría necesitado la ambulancia para concurrir al llamado de emergencia no fue excesivo y colaboró para que la víctima perdiera mucha sangre por las lesiones de los órganos internos.
En cuanto al motivo del enfrentamiento o encono entre ambos protagonistas, ninguno de los testigos pudo establecerlo.
Paulo Ignacio Rodríguez era un laburante cuentapropista, tenía dos hijos y no registraba antecedentes penales.