Cientos de miles más… o menos. Los datos del censo de población que se desarrolló en 2022 en todo el país comenzaron a ver la luz ayer con las publicaciones del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Más allá de la sustancial diferencia entre las cifras iniciales dadas a conocer en mayo del año pasado y las de ayer (1.282.704 habitantes menos), el relevamiento anticipa una de las discusiones que marcará la agenda política y económica de este año: la Coparticipación Federal de Impuestos a favor de las provincias que registran más habitantes que los estimados.
Y es que con los datos de mayo de 2022 los distritos hicieron cuentas e inmediatamente elevaron reclamos por fondos, pero con las modificaciones conocidas ayer también se movieron las variables socioeconómicas relacionadas con la población: PBI, empleo, desempleo, pobreza e indigencia en cantidades sustanciales.
En ese sentido, cabe destacar la situación de Misiones, por caso la provincia más poblada del Nordeste argentino. Su posición demográfica y su desempeño económico frente al resto de los distritos aún no son equiparables con el reducido reparto de fondos coparticipables, lo que amerita entonces seguir adelante con el reclamo a la Nación.