Una mujer de 62 años se presentó ayer en la comisaría de Garupá y denunció que desde hace varias semanas aguarda para que el hombre con el que pactó la construcción de una pileta en el patio de su casa en el barrio 92 Viviendas aparezca y cumpla con el acuerdo o le reintegre la mitad del dinero presupuestado que le entregó, supuestamente, para los materiales y a modo de seña para iniciar la obra.
La denuncia por estafa indica que este constructor sería el mismo ya denunciado en la comisaría Novena de la Unidad Regional X en el barrio Itaembé Miní en Posadas.
En el caso de Garupá, la mujer le entregó 324 mil pesos al “piletero” en enero y hasta ayer no habría cavado un solo centímetro para la piscina y tampoco respondió a los llamados y mensajes enviados por la víctima.
Como lo adelantó PRIMERA EDICIÓN el domingo pasado, las andanzas del “piletero estafador” comenzaron a salir a la luz con la presentación policial de una empleada de la Justicia provincial que llegó al juez de Instrucción 6, Ricardo Walter Balor y al fiscal René Germán Casals.
La misma maniobra
La denunciante que acusó al presunto constructor, lo había contactado el último día de 2022 a través de la red social Facebook para solicitar un presupuesto para pasar el verano con una pileta en su vivienda. Una vez avanzado el proyecto, el “piletero” le solicitó la mitad del dinero pautado para la construcción.
La mujer también confió y le entregó 357 mil pesos en efectivo para que en siete días la piscina esté completa y pueda ser utilizada.
Pero la labor de palas, picos y traslado de bolsas de arena y cemento duró cuatro días desde el 2 hasta el 6 de febrero.
Al día siguiente el constructor y sus ayudantes no aparecieron más. Desde entonces no le respondieron mensajes a la víctima, salvo una respuesta por Facebook en la que el presunto estafador aseguró: “Quédese tranquila señora, le pido mil disculpas, tuve un percance, yo le voy a devolver toda la plata, no acostumbro a quedarme con nada ajeno”.