Cuando la dirección del Diario nos invitó a elaborar estos artículos, el desafío principal que nos propusimos fue traducir a un léxico común y corriente asuntos que por su naturaleza reúnen una doble complejidad, son de estricta índole legal y, a su vez, se relacionan íntimamente con las ciencias de la información y la comunicación. El presente artículo tratará sobre cómo mejorar la seguridad de nuestras cuentas digitales.
En la era digital, donde todo lo hacemos interactuando a través de un ordenador o un teléfono inteligente, nuestros datos personales se han convertido en uno de nuestros bienes más valiosos. Desde la contraseña de nuestro “Home Banking” o billetera digital, hasta nuestras interacciones en cualquier red social, se han transformado en una mina de oro para los ciberdelincuentes, quienes utilizando técnicas de “inteligencia social”, o diferentes ardides o engaños, logran hacernos caer en sus trampas, y así agredir nuestro patrimonio.
Un claro ejemplo de ello es el “Phishing”, que consiste en la recepción de un correo electrónico o un mensaje directo a través de alguna plataforma de mensajería, donde el remitente se hace pasar por alguna entidad bancaria o institución pública o privada, con el fin de engañar al destinatario, y así atacar su patrimonio. En ocasiones, estos mensajes suelen incluir enlaces que conducirán a sitios web falsos, idénticos a los originales, donde la víctima simplemente entregará las credenciales o informaciones que el delincuente requiera.
Situación similar es la clonación o suplantación de identidad, la cual consiste en la acción de apropiarse de la identidad de otra persona, haciéndose pasar por ella, para así obtener alguna ventaja, beneficio o lucro determinado. El ejemplo más típico es cuando los ciberdelincuentes crean perfiles falsos en redes sociales o aplicaciones de mensajería instantánea, utilizando los datos personales y la fotografía de otra persona, para hacerse pasar por aquella y luego contactar a terceros solicitándole el envío de dinero a través de transferencias bancarias. Aún en ocasiones, los ciberdelincuentes logran clonar las líneas telefónicas, apropiándose de su control total, para luego acceder a las cuentas digitales que se encuentran vinculadas a las mismas.
Los ciberdelincuentes siempre están buscando formas de acceder a nuestra información personal y hacer uso indebido de ella. Por eso es importante tomar medidas para proteger nuestros datos personales.
Si bien aconsejamos que ante la ocurrencia de un hecho similar al que aquí se describe inmediatamente se contacte con un profesional idóneo, en este artículo intentaremos instruir al lector con ciertas recomendaciones tendientes a evitar el acontecer de estas modernas modalidades delictivas.
Utilice contraseñas seguras:
Una contraseña fuerte debe tener al menos 8 caracteres, incluir letras, números y símbolos, y no debe ser fácil de adivinar. Es importante no utilizar la misma contraseña para varias cuentas y cambiarlas con regularidad. Ejemplo SuContraseña852.
Mantenga su software actualizado:
Mantener su software actualizado, incluyendo el sistema operativo y los programas de seguridad, es fundamental para proteger su información. Las actualizaciones solucionan problemas de seguridad y corrigen errores, lo que reduce el riesgo de hackeos y malware.
Sea cuidadoso con los correos electrónicos y los mensajes sospechosos:
No abra correos electrónicos o mensajes de texto sospechosos o de remitentes desconocidos, ya que pueden ser phishing. Siempre debe observar atentamente la casilla de la cual se remite el correo. Es decir, si recibe un correo de un banco, verifique que la casilla de correos de donde se remite la misiva electrónica finalice con el dominio del sitio web de la entidad bancario, por ejemplo [email protected].
Utilice la autenticación de dos factores:
La autenticación de dos factores es un método adicional de seguridad que requiere tanto una contraseña como un código enviado a su teléfono para iniciar sesión.
¿Cómo activar el doble factor de autenticación en nuestras aplicaciones?
Con la creciente frecuencia de los robos de datos y cuentas en línea, es crucial asegurar la privacidad y seguridad de nuestra información personal y financiera. Una forma efectiva de hacerlo es activar la autenticación de dos factores (2FA) en tus aplicaciones móviles.
La autenticación de dos factores agrega una capa adicional de seguridad a sus cuentas digitales, requiriendo no solo una contraseña, sino también un código enviado a su teléfono móvil o correo electrónico, recomendamos la última opción.
Las principales billeteras digitales, redes sociales, y aplicaciones de mensajería instantánea, cuentan con su propia metodología de autenticación de dos factores, es por ello, que aconsejamos al lector activarlas con el fin de robustecer su seguridad y evitar ser víctima de un ciberdelito.