Lo primero que tendrás que aprender al tener tu propio proyecto es que el tiempo es muy escaso y que lo podés hacer todo sola hasta cierto punto. Tarde o temprano vas a querer crecer. Necesitarás escalar tu negocio y tendrás que asumir que necesitas ayuda. Tendrás necesidad de delegar cosas. Empezarás a darte cuenta que tu valor “hora” es el más caro de tu proyecto y que ya no podés gastar el tiempo en tareas que podrías estar delegando.
El problema que se te presentará es que todavía no creciste tanto como para contratar gente y por el momento, el presupuesto sigue siendo acotado, o al menos, inestable. Un mes te va súper bien, otro casi no facturás.
Descubrirás que hay un mundo totalmente nuevo, una tribu que está lista para ayudarte, un lugar donde hay personas que pasaron por lo mismo que estás pasando vos.
Que pasan por lo que pasás vos todo el tiempo y que necesitan trabajar tanto como vos y se empiezan a abrir las posibilidades, se generan oportunidades de todo tipo y color.
Lo primero que tenés que identificar son tus necesidades y cuáles son los emprendedores que podrían ayudarte.
El punto importante es que en esta tribu hay soluciones a muchos problemas.
Netwoking, un término que está de moda, pero que a mí personalmente me gusta llamar Tribu Emprendedora.
Si recién estás empezando me gustaría invitarte a que tengas en cuenta una serie de tips que funcionan muy bien a la hora de entrar en una tribu y sacarle provecho:
1. Construí relaciones sinceras y que los beneficios sean para ambos. No sirve construir si ambos no están contentos. Acuerdos que sirvan a todas las partes.
2. Sácales el jugo a las redes sociales. Sirve mucho hacer vivos con otras cuentas afines a la tuya. Te ayuda a sumar potenciales clientes y construir comunidad.
3. Escucha y observa mucho y todo. Estas dos competencias son claves para sacar mayor provecho a tu tribu emprendedora.
4. Cuando hablamos de tribu emprendedora no estamos hablando de conceptos teóricos. Es importante saber que estamos hablando de tomar acción. De hacer. De ponerse manos a la obra. Y en esa construcción de relaciones trabajamos conjuntamente con otros para ayudarnos.
El mensaje que les quiero dejar a todas las emprendedoras, muchas veces solitarias, muchas veces perdidas y llenas de preocupaciones, es que no están solas. Somos muchas y somos las que levantamos el país. Somos las que damos trabajo. Somos creativas, innovadoras, arriesgadas y eso vale mucho.
Unirte a una Tribu es una manera inteligente de emprender.
Si sos emprendedora, ya sos distinta. Ya saliste de tu zona de confort y estás siendo el protagonista de tu vida.
Que el sol salga para todos.