Este miércoles en Star+ se estrena mundialmente el documental “Amén. Francisco responde”, en el que el Papa Francisco habla durante más de una hora con un grupo de 10 jóvenes de entre 20 y 25 años.
Uno de los momentos más llamativos de la charla, fue cuando la joven argentina, Milagros, le entrega un pañuelo verde de los usados durante la campaña para la aprobación del aborto en el país. La chica oriunda de la provincia de Santiago del Estero le pregunta por qué la Iglesia no acompaña a las mujeres que deciden abortar y en cambio las cuestiona y señala como si fueran criminales.
Ante esta situación, Francisco comenta que “a los curas siempre les digo que cuando se acerca una persona en esa situación, con un cargo de conciencia, pues es dura la huella que deja un aborto en la mujer, que por favor no pregunten mucho y sean misericordiosos, como es Jesús. Uno, por más pecador que sea, por más que lo deje todo el mundo, el Señor no lo deja nunca”.
“Hay que verlo científicamente y con cierta frialdad. Cualquier libro de embriología nos enseña que al mes de la concepción ya está delineado el ADN y están dibujados todos los órganos. Por tanto, no es un montón de células que se juntaron, sino que es una vida humana. Una cosa es acompañar a la persona que hizo esto y otra cosa es justificar el acto. La pregunta ética es: ¿es lícito eliminar una vida humana para resolver un problema? ¿Es lícito alquilar un sicario para resolver ese problema?” agrega el pontífice dejando en claro su postura sobre el tema.
Fuente: Medios Digitales