Este 7 de abril se cumplen 77 años desde aquel día de 1948 en que los países del planeta se unieron por el bienestar de su población y fundaron la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el fin declarado de “promover la salud, preservar la seguridad del mundo y servir a los vulnerables, de modo que todas las personas, en todas partes, puedan alcanzar el más alto grado de salud y bienestar”.
Por eso cada 7 de abril se conmemora el Día Mundial de la Salud, que este año tiene como lema “Comienzos Saludables, Futuros Esperanzadores”.
Así se dará inicio a una campaña de un año de duración sobre la salud materna y del recién nacido, en la que instará a los gobiernos y a la comunidad de la salud a intensificar los esfuerzos para poner fin a las muertes prevenibles de madres y recién nacidos, y a dar prioridad a la salud y el bienestar de las mujeres a largo plazo.
Desde la OMS argumentan que, según las estimaciones actuales, cada año cerca de 300 mil mujeres mueren durante el embarazo o el parto, más de 2 millones de recién nacidos fallecen en su primer mes de vida y millones más nacen muertos.
Si las tendencias actuales se mantienen, 4 de cada 5 países seguirán estando lejos de alcanzar las metas de mejora de la supervivencia materna de aquí a 2030, y 1 de cada 3 no logrará las metas relativas a la reducción de la mortalidad neonatal.
Claves del Día de la Salud 2025
- “Podemos poner fin a la mortalidad materna y neonatal prevenible”. La OMS llama a que “se intensifiquen masivamente los esfuerzos para garantizar el acceso a una atención respetuosa de alta calidad para las mujeres y los recién nacidos, especialmente en los países más pobres y en las situaciones de emergencia, donde se producen la mayoría de las muertes”.
- “Las necesidades de salud de la mujer van más allá de la simple supervivencia al parto. Las mujeres de todo el mundo merecen el apoyo de los prestadores de servicios de salud que escuchen sus preocupaciones y satisfagan sus necesidades, incluso en el período posparto prolongado, cuando millones de personas aún carecen de cuidados intensivos”.
- “El acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva sustenta los resultados maternos y la capacidad de las mujeres para planificar sus vidas y su salud: la capacidad de acción y el empoderamiento de las mujeres y las niñas es una ‘pieza faltante’ fundamental para abordar la mortalidad materna y lograr la salud para todos y todas”.
- Invertir en todos los aspectos de la salud materna y neonatal “trae inmensos beneficios para las familias, las comunidades y las sociedades, aborda algunas disparidades clave en materia de salud y añade años y amor a la vida de miles de millones de mujeres y sus familias en todo el mundo”.
Fuente: OMS